La investigación por el femicidio de una enfermera de Puerto Esperanza tiene a un sospechoso de 45 años detenido y, si bien se aguarda que se complete la autopsia, en principio se supo que las lesiones fatales habrían sido producidas por los golpes.
Irene Elvira Medina (61) fue hallada sin vida entre la noche del viernes y la madrugada del sábado en un terreno baldío contiguo al domicilio donde la mujer trabajaba como cuidadora de una persona.
Investigadores y peritos policiales la encontraron boca abajo con lesiones evidentes en el rostro. Identificaron golpes en la zona ocular, en la nariz y un corte en el mentón.
Posteriormente confirmaron que esas lesiones le provocaron rotura de huesos de la cara y de la calota craneal, traumatismos gravísimos que habrían provocado su deceso.
Según los investigadores, inicialmente se descarta que el autor haya realizado una maniobra de estrangulamiento. Al respecto, el sospechoso detenido es hijo del hombre al que la mujer cuidaba.
Cuando la policía llegó a la casa del barrio Villa Nueva, dialogaron con él y notaron que tenía lesiones similares a rasguños en el rostro. Pidieron autorización al juez para allanar el sitio y a los pocos minutos hallaron el cuerpo de la mujer.






