El aguinaldo es una buena oportunidad para realizar inversiones y la mayoría de las personas siempre acuden al dólar para refugiarse económicamente. Sin embargo, ante la actual situación cambiaria de una moneda “planchada”, varios especialistas recomendaron qué pueden hacer los trabajadores con ese dinero extra que ingresa a sus bolsillos en este mes de junio.
“El aguinaldo es una oportunidad para empezar a tomar decisiones financieras más conscientes. No hace falta ser experto para empezar, lo importante es informarse y dar el primer paso”, afirmó Vanesa Di Trolio, manager de la entidad financiera digital Reba.
Además, indicó que “el dólar sigue siendo una de las opciones preferidas para resguardar ahorros, especialmente luego de la actualización normativa que se implementó en abril, cuando se eliminó el límite de USD 200 mensuales y el plazo de estacionamiento para el dólar MEP”.
En la actualidad existen diversas alternativas de inversión, como CEDEARs, Fondos Comunes de Inversión (FCI), y la compra de moneda extranjera, tanto en su versión oficial como mediante dólar MEP.
Cabe recordar que el aguinaldo, según establece la Ley 27.073, debe pagarse como máximo el 30 de junio y es un dinero que reciben los trabajadores en relación de dependencia.
Cómo dividir el aguinaldo
Según las recomendaciones de los expertos, una forma de organizar ingreso de plata es dividirlo en tres partes. El primer paso es destinar un 50% al ahorro en dólares, lo cual es ideal para quienes tienen objetivos de largo plazo.
En segundo lugar, un 30% puede orientarse a inversiones de corto y mediano plazo, como los plazos fijos tradicionales o los Fondos Comunes de Inversión (FCI), que ofrecen rendimientos con cierto grado de liquidez.
Mientras que el 20% restante, los expertos financieros sugieren destinarlo a cancelar deudas o realizar consumos postergados, como pagar el resumen de la tarjeta de crédito, saldar préstamos personales o renovar elementos del hogar.
El desafío de invertir
En este punto, las recomendaciones varían según el perfil del inversor, con el objetivo de fomentar decisiones financieras informadas y aprovechar las oportunidades del momento.
Según el Banco Central de la República Argentina existen tres tipos principales: conservador, moderado y agresivo. El perfil conservador prioriza la seguridad y la estabilidad, tolera poco riesgo y busca preservar el capital. Suele inclinarse por inversiones como el dólar oficial, los plazos fijos tradicionales o los FCI de bajo riesgo, como los fondos “money market”.
Por su parte, el moderado busca un equilibrio entre seguridad y rendimiento, y está dispuesto a asumir cierto nivel de riesgo a cambio de mejores retornos. En estos casos, instrumentos como el dólar MEP, los FCI o los plazos fijos UVA son alternativas comunes.
Por último, el perfil agresivo apunta a una mayor rentabilidad en el largo plazo, acepta la volatilidad del mercado y suele optar por productos como CEDEARs, dólar MEP o FCI de renta variable.





