Hace apenas poco más de ocho años, una mujer de 56 años había sido hallada asesinada en su vivienda de Candelaria. La investigación del caso tuvo al menos seis involucrados y entre ellos un joven de entonces 17. Era conocido como “Polaquito” y se había profugado. El miércoles fue detenido en la provincia de Corrientes.
Hoy Luis Duarte tiene 25 años y desde hacía tiempo residía en la localidad de Itá Ibaté donde realizaba tareas como changarín. Vivía en una casa alejada y no se metía en problemas, señalaron medios de esa provincia.
Pero la policía correntina lo vio de noche en actitud extraña y lo demoraron para chequear sus antecedentes. Fue así que supieron que era requerido por la justicia misionera en la causa por el asesinato de Neris, que se cree era su abuela.
La investigación inicial estuvo a cargo del Juzgado de Instrucción 7, en ese entonces a cargo del magistrado Carlos Giménez, quien cerró el expediente para que los implicados fueran juzgados por el Tribunal Penal 2.

El caso
El 17 de mayo de 2017, los vecinos del barrio San Cayetano de Candelaria, frente al murallón construído para la autovía de la ruta 12, llamaron a los Bomberos porque había un incendio en la casa de Asunción Neris , conocida como “Chona”, a quien justamente no veían por la zona.
Al no divisar a la mujer pensaron lo peor, que podía haber quedado atrapada dentro de la vivienda. Pero cuando apagaron el fuego no había rastros de ella.
Su primo, que había sido avisado acerca del fuego y fue al lugar para ayudarla, notó que había ladrillos sobre unas chapas que cubrían un pozo que había sido excavado para albergar agua pero aún estaba en construcción.
A este Diario el hombre relató en aquella oportunidad: “Levanté la chapa, vi una frazada y una colcha, la cual sacamos con la ayuda de un Policía y un bombero. Con una tacuara uno de los efectivos empezó a ‘escarbar’ y movió un tronco redondo que estaba de punta. Luego lo sacaron y ahí vimos que flotó de golpe una persona envuelta completamente en una sábana. Era mi prima”, lanzó conmovido.
La mujer no tenía hijos ni pareja y vivía sola en esa casa luego que sus hermanas fallecieran. Tampoco tenía amigos, solo contaba con la compañía de un perro mestizo color blanco. El primo indicó que probablemente los que hicieron eso la conocían y por eso la habían matado para robarle sus pocas pertenencias. También que al menos habían hecho inteligencia previa, porque el pozo estaba al ras del suelo y era difícil saber donde estaba para usarlo precisamente para descartar el cuerpo.
La investigación determinó que el móvil del crimen había sido ocultar el robo de una magra pensión, una TV y una garrafa. La autopsia determinó que “Chona” Neris murió a causa de una golpiza que le provocó múltiples fracturas y principalmente un golpe en el cráneo con un elemento romo.
En las primeras 24 horas detuvieron a tres de los implicados y al momento de ser indagados, dos hermanos de 22 y 27 años, dos jóvenes de 19, “Polaquito” de 17 y otro menor, fueron indagados por “homicidio criminis causa”. Manifestaron que el día del hecho todos estuvieron pendientes del partido Boca River y eran inocentes. Respecto a “Polaquito” Duarte se estima que en las próximas horas será traído a Misiones.





