Los investigadores no pierden esperanzas de obtener alguna pista que permita dar con el paradero de los delincuentes que el pasado miércoles a la mañana se alzaron con 120 millones de pesos a punta de pistola. Tal como publicó este Diario, la víctima fue un comerciante de Wanda, quien fue interceptado por cuatro asaltantes cuando se dirigía a una entidad bancaria a realizar un depósito.
El damnificado, Pablo Javier Ortiz de 46 años, contó en su denuncia ante la policía que transitaba poco después de las 8 sobre la avenida Los Inmigrantes de esa ciudad, cuando a medio kilómetro del cruce con la ruta nacional 12, la camioneta Volkswagen Amarok negra que conducía fue cruzada por una Renault Duster gris claro de la que descendieron tres hombres armados, el cuarto se quedó al volante, quienes en pocos segundos lo hicieron bajar y le quitaron dos bolsos con el dinero en efectivo en billetes de diversa denominación.

Tras apoderarse del teléfono celular (un iPhone 14) y arrancarle una cadena de oro del cuello al comerciante, los asaltantes huyeron en el mismo transporte del que descendieron. Varios metros más adelante el teléfono fue arrojado y hallado por un vecino que lo entregó a la autoridades policiales.
La víctima no sufrió lesiones graves debido al accionar de los delincuentes. Fue así, que lo último que se sabe de la banda es que huyeron hacia la ruta nacional 12.
Inteligencia previa
Desde la investigación no descartan que los autores del atraco tenían datos precisos respecto a los movimientos financieros de la víctima, por lo que deducen que habrían hecho labores de vigilancia y recolección de información precisa previo al robo.
El damnificado es propietario de un comercio de distribución de alimentos en Puerto Esperanza. Principalmente productos cárnicos, como ser pollo. Para colaborar en la pesquisa el pasado jueves se sumaron a los investigadores de la UR-V de Puerto Iguazú, efectivos de la división “Robos y Hurtos” de la Dirección Investigaciones Complejas de la Policía provincial. Una de las hipótesis de los efectivos es que pueda tratarse de una banda integrada por paraguayos con nexos locales, no obstante no se descartaba nada. En tal sentido, se solicitó colaboración a fuerzas federales que custodian la frontera. Por otra parte, se analizaban cámaras de videovigilancia de la zona.








