El hombre acusado de asesinar de una puñalada a su propio hermano podría estar hoy frente al juez de Instrucción 1 de esta capital, Marcelo Cardozo.
La indagatoria está prevista desarrollarse a la mañana, tras lo cual el sospechoso podría declarar y dar su versión de los hechos o abstenerse de hacerlo. Incluso podría ser imputado por el hecho y continuar detenido.
La investigación por el crimen de Miguel Ángel Pérez Yañak (41) comenzó apenas fue reportado el hallazgo de su cadáver por un vecino, el pasado domingo a las 20 en cercanías del arroyo Negro que atraviesa la zona rural sobre la ruta nacional 105 (en inmediaciones al campo La Eugenia y a la altura del paraje Santa Inés de Garupá). Apenas se revisó la escena, se halló un termolar con restos que serían de cabellos y que fue incautado para pericias. Para la policía, esto fue un claro indicio de que pudo existir un enfrentamiento, es decir que alguno de los dos involucrados (agresor y víctima) podría haber utilizado dicho elemento como objeto de ataque o defensa. Los peritos no hallaron el arma que se habría utilizado para cometer el crimen, pese a los intensos rastrillajes.
Con el correr de las horas, en base a testimonios y otras pistas, surgió como sospechoso el hermano del fallecido, un individuo de 31 años domiciliado en Candelaria, quien fue detenido en averiguación del hecho. Se supo que lo habrían visto junto a la víctima horas previas al hallazgo del cuerpo.
Miguel Ángel residía en el barrio 140 Viviendas de Garupá, tenía cinco hijos y era chofer del municipio de esa localidad. Al otro día del hecho se supo mediante el resultado de la autopsia que se trató de un homicidio, ya que la víctima sufrió una certera estocada a centímetros del corazón. Aún no hay una hipótesis concreta del móvil del crimen y los investigadores prefirieron “no hacer conjeturas por el momento”.
Antecedentes
Voceros del caso confiaron que el sospechoso registraría antecedentes por violencia familiar. El pasado martes se allanó su domicilio en Candelaria, ubicado en la calle Jorge Newbery y en cercanías a la cancha de Candelaria, donde secuestraron prendas de vestir y el teléfono celular del sospechoso. Estos objetos también serán analizados por personal de la Policía Científica. No obstante, el arma presuntamente utilizada aún no fue hallada.






