El CeMoAS Posadas cumplió este lunes cuatro años de contención y trabajo integral con jóvenes en conflicto con la ley. Desde su creación en 2021, través de la Ley XIV – N°14, el Centro Modelo de Asistencia y Seguimiento (CeMoAS) se consolidó como un espacio clave para abordar con sensibilidad y profesionalismo situaciones de alta complejidad social.
Durante el acto por el aniversario, el secretario de Prevención de Adicciones y Control de Drogas, Roberto Padilla, recordó el origen del proyecto y valoró su importancia actual. Destacó que el CeMoAS cumple “un rol fundamental en el trabajo con los niños, niñas y adolescentes”, al ofrecer un abordaje institucional que reemplazó la antigua práctica de alojar a menores en comisarías.
Según explicó Padilla en diálogo con PRIMERA EDICIÓN, en lo que va del 2025 ya se contuvo a 40 menores en la sede capitalina, que sigue siendo la de mayor flujo de la provincia debido a la alta densidad poblacional en comparación con las otras sedes.
“Hoy, un menor en conflicto con la ley ya no es trasladado a una comisaría, sino a alguno de los dispositivos del CeMoAS que tenemos en la provincia: Posadas, Oberá, Eldorado y, más recientemente, Puerto Rico”, explicó.
“Han disminuido los ingresos”
Actualmente, el centro posadeño funciona en el barrio San Gerardo, bajo la dirección de la alcaide mayor Valeria Guadalupe Bendig y la subdirección del alcaide principal Juan Maximiliano Benítez.
De acuerdo a Padilla, el promedio de edad de los jóvenes ingresados a lo largo de estos cuatro años ronda entre los 16 y 17 años, aunque también se han registrado casos de niños de apenas 10 u 11 años. En la mayoría de los ingresos no se detectó una red de contención familiar. “La gran mayoría de las veces, cuando los chicos llegaban, no había familias ni contexto: el conflicto con la ley se daba justamente por esa problemática o falta de contención”, señaló.
Además, indicó que el 99% de los casos corresponde a varones y que el 70% presenta consumos problemáticos, lo que activa la intervención directa del Ministerio de Prevención de Adicciones y Control de Drogas. “El balance es muy bueno: han disminuido los ingresos, pero es un trabajo que continúa”, expresó.
Posadas continúa siendo el centro con mayor caudal de adolescentes, aunque recientemente, durante el 2024, se inauguró el CeMoAS de Puerto Rico, que hasta la fecha ya atendió a 12 menores y brinda cobertura a una amplia zona que abarcaba desde Montecarlo hasta San Ignacio.
Padilla, también resaltó que la labor diaria también implicaba una coordinación permanente con otros organismos. “Articulamos con la Defensoría de Niños, Niñas y Adolescentes, con la Subsecretaría de la Niñez, con los Hogares de Día, con las iglesias, con las entidades deportivas”, detalló. “La estrategia central es fortalecer los vínculos familiares, el retorno al sistema educativo y las oportunidades de capacitación”, agregó.

Espacios de formación y acompañamiento
Desde su rol como directora del CeMoAS Posadas, Valeria Guadalupe Bendig remarcó que el centro nació de una convicción: “detrás de cada acto delictivo hay una historia, y muchas veces condiciones de vida atravesadas por la vulnerabilidad. Requieren una mirada comprensiva y un abordaje integral”, sostuvo.
“En estos cuatro años hemos trabajado vigorosamente para revertir esa realidad, ofreciendo a los niños y jóvenes una oportunidad real de cambiar sus vidas y construir un futuro mejor”, remarcó y explicó que el trabajo del Centro se enfoca en fortalecer factores de protección como la educación, la capacitación laboral, el buen uso del tiempo libre y, sobre todo, el fortalecimiento del vínculo familiar.
Para lograrlo, se impulsaron múltiples espacios de acompañamiento y formación, entre ellos “talleres terapéuticos, talleres artísticos como arteterapia y taller de macramé, taller ‘No más violencia’ actividades deportivas, acompañamiento educativo y laboral, trabajo en equipo, articulación con diferentes entes, puntos preventivos y asistenciales: CAP N°5, Hogar de Día, Cáritas”.

“Cada joven tiene un potencial único”
“Todo esto no sería posible sin el apoyo de las instituciones, las familias y la comunidad en general”, subrayó Bendig. Y agregó: “Sabemos que el camino de la reinserción social no es fácil y que los niños y jóvenes enfrentan numerosos desafíos y obstáculos. Sin embargo, estamos convencidos de que, con el trabajo mancomunado, el compromiso de todos y la convicción de que cada joven tiene un potencial único, es posible”.
Al cerrar el acto, Bendig renovó el compromiso institucional de seguir trabajando “con entusiasmo, entrega y profesionalismo”, para brindar herramientas concretas a los jóvenes en situación de vulnerabilidad.
Por su parte, el capellán Alejandro Ferreyra y el padre Alberto Barros, brindaron la bendición en el aniversario, destacando la tarea de contención y acompañamiento.
En la ceremonia además participó el presidente del Instituto de Artes Audiovisuales de Misiones, Sergio Acosta, y con integrantes del equipo del Cine Móvil proyectaron una película a los niños y adolescentes que se encuentran en resguardo.










