Si la energía sigue al pensamiento,
¿cómo puedo dejar a éstos volar según el
viento, acaso no sé que Dios es mente y el
Universo mental
y que a Su semejanza me hizo a Él igual?
Y si en Su benevolencia el libre albedrío me
diera para que en libertad el sendero hacia
Él eligiera,
¿puedo yo acaso aduciendo ignorancia creer,
que eligiendo el camino del mal el Bien voy
a obtener?
Si bien la vida una escuela es,
llegado está el tiempo de dejar la niñez.
A los esenios deberíamos imitar
que a los 4 años ya aprendían a su mente
domar.
Preserva tu energía en toda ocasión,
no alimentes con pensamientos una baja
emoción pues atraerás a tu vida situaciones
de igual vibración.
La formación de la mente en los esenios comenzaba a los 4 años, meditaban diariamente: 1) se sentaban muy quietos pensando cómo respiraban
2) se enfocaban en algo hasta volverse uno con eso.
3) se desenfocaban. Meditar es simplemente concentrar todos los pensamientos y energías en un punto que puede estar dentro o fuera de ti: Visualizar un punto interior de enfoque rodeado de luz (centro de la frente), atraer la energía de afuera hacia dentro por la coronilla de la cabeza hasta SENTIR la energía, ahí la canalizas para ti o la puedes pasar a otra persona, para curar. Por ejemplo, Sólo se puede ofrecer, si no se acepta se canaliza hacia otro o se LIBERA por los pies, tiene que ir a alguna parte, si no la liberas podrías provocarte un paro cardíaco u otras cosas.
“Jesús y los esenios” D. Cannon.
Las emociones son las voces del alma, no hay que reaccionar ni evitarlas, si aceptarlas y sentirlas. Es el lenguaje que entiende el campo cuántico, por lo que están creando tu realidad constantemente. Éstas duran en el cuerpo 80-120 seg., si llevas años manteniendo un rencor, sabe que son tus pensamientos los que están alimentando ese estado (a baja emoción mayor propensión a enfermar).
Al ser energía electromagnética funcionan como imán atrayendo personas y situaciones que vibran en igual frecuencia. Lo que piensas, sientes y sostienes en el tiempo define la vida que creas.
Graciela del Carmen Zaimakis de Abraham
Escritora/ Escuela de Pensamiento
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