OBERÁ. Por falta de agua ayer algunas escuelas de esta ciudad se vieron obligadas a suspender las clases. El servicio que presta la Cooperativa Eléctrica Limitada de Oberá (CELO) sufrió un corte total el miércoles debido a la rotura de un caño de impulsión, pero como consecuencia de ello hasta ayer varios sectores de la ciudad no contaban con el líquido vital,A esto se suma a que hay barrios donde los usuarios desde hace varias semanas reciben el agua en forma irregular por la falta de presión.Ayer nuevamente las quejas de los vecinos se sucedieron por los medios locales, ya que pasaron más de 24 horas sin una gota de agua, sumado esto a la incertidumbre de no saber cuando se va a normalizar el servicio.La mañana comenzó con alteraciones para muchos padres ayer en esta ciudad, porque apenas habían ingresados sus hijos, en la Escuela 305, por ejemplo, fueron notificados que debían pasar a retirarlos porque las clases se suspendían todo el día por falta de agua.Criterio similar adoptaron las autoridades de la Escuela 304, que debido a no tenían agua para la higiene personal de los alumnos decidieron suspender las clases hasta tanto se normalice el servicio. Según se supo, también la Escuela 688 no dictó clases ayer por la misma razón.En otros establecimientos donde tenían agua el dictado de clases fue normal. La supervisora Escolar María del Carmen Jalil afirmó que “las escuelas no pueden desarrollar las actividades sin agua, sobre todo las que tienen matrículas grandes, porque ya en el primer recreo los baños quedan colapsados”, describió.Al mismo tiempo recordó que “por el calor los niños deben tomar mucha agua y además debemos cuidar la higiene y salud de ellos, así que es difícil dar clases de esta manera”, agregó.Por otro lado, en el Colegio Mariano hace varias semanas que tienen problemas de agua potable, por lo que decidieron comprar una bomba y sacar agua de un pozo que almacenan en un aljibe y se utiliza para la higiene de los niños. En tanto que para el consumo colocaron dispenser en el lugar. “Un desperfecto”Ayer a la tarde, en declaraciones publicas, Alejandro De Paula, gerente general de la CELO, afirmó que “lo que ocurrió fue un desperfecto que surgió en la cañería de impulsión en la toma del arroyo Ramón y generó un corte total en el servicio, fue una cuestión fortuita, y se tomó conocimiento en la mañana del miércoles”, argumentó. El directivo de la CELO contó que “se trabajó durante toda la jornada para solucionar el problema, las tareas culminaron a las 17 y se empezó a bombear y demora un tiempo para que se llenen las cisternas y el servicio se restableció a las 22, pero a algunos sectores tarda en llegar”, dijo.
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