La construcción está terminada, pero faltan la electricidad y el agua potable. Desde el Iprodha informaron que en unos 60 días estarían conectados los servicios en el lugar.
El Instituto Provincial de Desarrollo Habitacional construyó 100 viviendas sociales en medio de una zona rural de San Vicente y aún no puede entregarlas a sus beneficiarios porque no tienen luz eléctrica ni agua potable.
El barrio está ubicado en medio de una colonia a 5.000 metros del centro de la ciudad y hubo que abrir un camino acorde a una zona urbana. Los beneficiarios serían los habitantes del barrio Villa Tripa y de otros asentamientos de escasos recursos que necesitan ser reubicados.
Las tratativas entre los intendentes y los funcionarios del IPRODHA permiten la construcción de barrios alejados de la zona céntrica y urbana, donde no hay facilidad de acceder a los servicios básicos.
De hecho, este barrio social con casas de madera de un poco más de 36 metros cuadrados ya está construido desde hace varios meses, pero no pueden entregarse las casas porque no llegan el agua potable y la energía eléctrica.
“En los plazos previstos”
El presidente del Instituto Provincial de Desarrollo Habitacional, Santiago Ros, explicó a PRIMERA EDICIÓN que ahora están construyendo nexos de agua, eléctricos y viales y agregó que creo que en 60 días podrá estar listo todo para que las casas sean entregadas.
Ros indicó también que estamos trabajando con los plazos previstos, solo que las viviendas avanzaron más rápido y se terminaron antes.
En espera
Hace más de cuatro años que se comenzó a construir el nuevo barrio. En agosto del año pasado, el intendente, después de una granizada que dañó a más de 300 casas, se comprometió ante los vecinos del barrio Villa Tripa a que antes de las elecciones de octubre iban a entregarles las nuevas viviendas, pero se retrasó porque el barrio sigue sin los servicios básicos necesarios.
En el caso del agua potable, está construido un tanque elevado y ya está listo para sacar agua potable un pozo perforado, pero la energía eléctrica todavía no llegó. Desde la empresa EMSA no terminaron la construcción de la línea de alta tensión que permitiría llegar la luz desde la altura de la ruta nacional 14, que está a unos 4.000 metros del lugar.
Los postes de cemento están parados hasta la mitad del trayecto y la obra está paralizada desde noviembre.
Los postes que faltan para llegar al nuevo barrio están al costado del camino de acceso y el cableado todavía no está colocado en la totalidad del tendido.
Según pudo saber PRIMERA EDICIÓN, la adquisición de este predio, una media chacra, fue a una persona de Posadas que lo ofreció al IPRODHA hace más de cuatro años atrás. Desde ese organismo se impulsó a la Municipalidad sanvicentina para que apruebe la construcción de las viviendas.
Según se pudo saber, las 100 nuevas unidades habitacionales estarán destinadas a familias de bajos recursos que viven actualmente en el barrio Villa Tripa, un grupo de más de 80 casas que está al costado de la ruta nacional 14, unos 200 metros después del acceso norte a la ciudad.
Cuando el intendente les prometió reubicarlos en ese nuevo barrio, habían sido censadas unas 80 casas. Hoy se puede ver que son muchas más, ya que en los últimos tres meses se construyeron más casillas precarias.
El nuevo barrio está ubicado en una zona rural a cinco kilómetros del centro de la ciudad, detrás de un viejo obraje de una empresa vial. En su alrededor solo hay chacras que producen té, tabaco, yerba mate, producción frutihortícolas y animales y algunos potreros.
Discussion about this post