Contribuyentes obereños se manifestaron molestos con la decisión de la intendencia de Oberá de autorizar que todos los lunes en dependencias municipales se realice un oficio religioso a cargo de un grupo de una Iglesia Evangélica. “Me fui a pagar la patente y me encontré con ese cuadro. Un pastor que se puso a rezar a los gritos con un grupo de seguidores, mientras los empleados quedan quietos esperando a que finalicen” contó Miguel. “Yo fui con mi hija que se asustó y la verdad no entendí nada. Así que pregunté a un empleado y me dijo que eso pasa todos los lunes y que está autorizado por el Intendente”, detalló el vecino.Según manifestó uno de los empleados del municipio a los trabajadores nunca les consultaron sobre esta posibilidad. “Es una imposición, a mí me parece un atropello, así que me levanto y salgo respetuosamente, cuando terminan vuelvo a mi trabajo”, confesó.Para Miguel, no es un lugar indicado para una actividad religiosa. “Creo que hay libertad de culto, así no hay opciones, es una falta de respeto, sea de la religión que sea, no pueden imponer al contribuyente, me parece que no corresponde. En todo caso que lo hagan en un espacio exclusivo, al que asistan quienes quieran de manera voluntaria, pero no donde vamos a pagar los impuestos”, insistió. Desde el municipio indicaron que se trata del pedido de un empleado municipal. “Es un inspector que es pastor, rezan por cinco minutos. En su rol de pastor solicitó rezar todos los lunes para pedir por sus compañeros y agradecer por el trabajo. Pedido que fue autorizado. Igualmente ahora lo va a hacer los primeros lunes de cada mes”, subrayaron a PRIMERA EDICIÓN.Más allá de las buenas intenciones varios vecinos se mostraron incómodos con la situación que se plantea en el edificio municipal. “Cuando estaba ahí nos miramos entre las personas que estábamos en el salón y la verdad nos molestó. Además de que se paraliza todo, porque no se puede escuchar nada más que al grupo que religioso”.
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