Con poco movimiento, por momentos hasta nulo, las librerías locales dan pelea a su enemigo íntimo: las ventas bajas. Resistiendo a los panoramas económicos, la inflación y al “pacman” del vecino país, el circuito comercial de Encarnación (Paraguay), grandes y pequeños comerciantes tratan de mantener, lo máximo posible, los precios del año pasado, remarcando lo justo y necesario. “Por el momento no hay muchas variaciones, en porcentajes grandes desde diciembre”, explicó Karina López, dueña de Librería Imperio a PRIMERA EDICIÓN.“A la inflación la peleo yo sola, desde mi local. Trato de no subir casi los precios porque quiero vender. Las ventas bajaron prácticamente un 80%”, comentó a su turno Lorena Fragueiro, propietaria de librería Lápiz y Papel. “Por ejemplo, los marcadores por diez unidades, los vendemos a 28 pesos, los 12 lápices de colores a 35 pesos, cuadernos por 100 hojas a 70 pesos, plastilinas por 10 a 28 pesos. Todo de primeras marcas. Esos son los precios que manejamos. Y sí, quizás en Paraguay esté mas barato, pero acá cuando comprás, comprás calidad”, finalizó. No es difícil preguntarse, si con el contexto actual nacional y los sueldos que cada vez rinden menos, al momento de comprar útiles escolares, las personas buscan calidad o precio.“Salí a comprar los útiles de mi hija ahora en enero porque tengo miedo que después empiecen a subir las cosas”, comentó una madre acompañada de su niña, que no desviaba la mirada de una mochila de la serie televisiva, “Soy Luna”. “Ahora todas están encaprichadas con Soy Luna. Y lo peor es que no están muy baratas”, señaló renegando la madre. Luego siguió relatando que “yo compro algunas cosas acá y otras en Paraguay, es la única que me queda para que rinda un poco más el sueldo”, retirándose del local arrastrando de un brazo a su hija encaprichada con la “mochi”.Variaciones por nivelLas listas de útiles escolares varían según las escuelas y el grado en el que estén los niños. Eso también produce que los costos sean distintos entre las mismas, “siempre las de Nivel Inicial salen más caras que las de primaria. La base de una lista para jardín o preescolar es de 800 pesos, de ahí para adelante y para primaria un mínimo de 400 pesos a 2.000 pesos”, detalló Adelina Hahn, de la Librería San José. Inmediatamente agregó que “estos precios son sin contar los manuales. Si los incluimos estamos hablando de una suma de 450 pesos aproximadamente por cada libro y los de inglés son los más caros porque son importados, a partir de 480 pesos”.Otra de las variables es si se paga en efectivo, en algunas librerías hay descuentos especiales. La dueña de Lápiz y Papel apuntó que “con tarjeta no hay descuentos porque nos hacen recargos y es el consumidor el que los tiene que pagar. Si pagan con tarjeta en un pago no tiene aumento, vale lo mismo que pagar en efectivo. Si hacen en dos o más sí, un 10%”.Encontremos las diferencias“Si comparamos con diciembre de 2015, en diciembre las ventas bajaron muchísimo. Los previsores de años anteriores que venían a comprar todo a fin de año para no hacerlo a último momento en febrero o marzo, no aparecieron. Esperamos que ahora más cerca de la fecha de inicio de clases se reactiven las ventas”, dijo esperanzada Lorena Fragueiro.Por otro lado Karina López, encargada y dueña de la distribuidora Efrén López y la librería Imperio, explicaba que “ las fechas de compra varían. Diciembre del año pasado se mantuvo tranquilo, muy tranquilo. Sin embargo este enero comenzamos, en el mayorista, a tener ventas grandes. En lo que respecta a la librería, todavía no, está tranquilo”.Según las librerías que PRIMERA EDICIÓN consultó los productos que menos salida tienen actualmente son las mochilas, cartucheras, lápices y lapiceras. “Es todo un presupuesto las mochilas. Más o menos están a partir de 300 pesos para arriba”, explicó una cajera de Librería Imperio, una respuesta que coincide con la de otros comercios del mismo rubro, y donde el principal motivo es “Encarnación”.





Discussion about this post