En una emotiva y concurrida ceremonia en la Parroquia Santa Rita, se consagró como sacerdote de la Diócesis de Oberá Néstor Fabián Szyszkowski (26 años), justo en el día en el que celebraron diez años de sacerdocio sus hermanos Marcos (36) y Marcelo Szyszkowski (34).Los hermanos, oriundos de Aristóbulo del Valle, son hijos de Luciana y Romualdo Szyszkowski. El 9 de diciembre de 2006, Luciana y Romualdo vieron consagrarse como sacerdotes a sus hijos mayores, Marcos y Marcelo. Transcurrieron diez años y fueron testigos de la ordenación del tercer hijo con vocación religiosa. “No me sorprende tener tres hijos consagrados ya que nos conocimos, con mi esposa, en la Capilla Santa Teresita de Aristóbulo del Valle. Entregué mis hijos a Jesús. Reconozco y acepto el poder de la oración, pero no por mis méritos vivimos este día, sino por la infinita misericordia de Dios que miró con benevolencia mi familia”, expresó a PRIMERA EDICIÓN Romualdo, quien con su esposa conformó una familia con diez hijos.Néstor Fabián estuvo acompañado por sus padres, hermanos, familiares, amigos y por integrantes de los diferentes grupos de la Diócesis de Oberá. La celebración estuvo a cargo del obispo, monseñor Damián Santiago Bitar.“Algo único”“El camino lo hacemos cada uno solo, después nos encontramos en el caminar. Es muy lindo compartir no sólo la familia sino también la vida y la vocación, es algo único. El agradecimiento es a Dios que puso en nuestros corazones el deseo de seguirlo y la voluntad, la fuerza que se necesita”, señaló a su turno el Padre Marcos. Luego agregó que “esto es muy especial porque estamos cumpliendo diez años de consagración así que la alegría es triple”, subrayó el sacerdote que actualmente cumple su tarea en la Parroquia San Juan Bautista de Santo Pipó y dicta clases en la Universidad Católica de las Misiones (Ucami).Para el mayor de los hermanos consagrados, “la Iglesia va creciendo sin prisa pero sin pausa, se va abriendo caminos, algunos impensados. Dios pone en el corazón de la gente el deseo de seguirlo, de buscarlo, en eso tratamos de ser puente. Este día resulta muy especial para la Diócesis de Oberá que es una Diócesis joven, es una gracia, una bendición la ordenación de Fabián”.El pasado viernes no fue un día más para la Diócesis de la Zona Centro. La alegría fue contagiosa y la Parroquia Santa Rita se convirtió en una fiesta. “Siento una alegría profunda por servir al pueblo de Dios y a toda la Iglesia. Es algo personal y único con Dios. Yo era muy chico cuando mis hermanos se consagraron, todavía no sabía que tomaría el mismo camino. Espero empezar con ansias, ser fiel a Dios y a lo que me pide la Iglesia”, manifestó el flamante sacerdote. Su primera misa la celebró en Aristóbulo del Valle y este domingo lo hizo en la parroquia que lo vio consagrarse.Fotos: Gentileza Gladys Acuña





Discussion about this post