Con el día de conmemoración a Jesús misericordioso, además este año los católicos estamos en el Año de la Misericordia, es una buena oportunidad para dedicar unos minutos a la reflexión y al diálogo con Jesús. Puedes hacer el ejercicio de RENOVAR SEMILLAS.Este ejercicio es, en realidad, la oportunidad de renovar las virtudes dormidas, las cualidades que más te cuesta hacer florecer. Cambiar malos hábitos, y como los hábitos son órdenes dadas al cerebro, lleva su tiempo desprogramarlo, si te propones hacer de forma cíclica este ejercicio, por lo menos cada 7 días, regarás estas semillas de forma continua dando la posibilidad a cambios y transformaciones en tu personalidad. Al hacerlo durante los siete domingos, a partir de la fiesta de la misericordia, la de Jesús de la misericordia terminarás el Domingo de Pentecostés, la fiesta del Espíritu Santo.1. Piensa en lo que más te cuesta lograr en lo cotidiano, por ejemplo: la alegría, la paz, la valentía, la generosidad, de todo lo que te aparece en la mente hoy, tienes que darle prioridad a lo que más te cuesta desarrollar. De todo lo que se te, elige una sola virtud y le pedirás a Jesús que renueve en tu corazón esta semillita que has elegido.2. Pasamos al tratamiento de la semillita: Tienes que ser consciente que regar las semillita que has elegido para que Jesús renueva en tu corazón, no la hará brotar tan solo con meditar, rezar; para que rompa los terrones de una tierra dura de pereza ; tienes que tener voluntad. Recuerda cada semillita que nos cuesta hacer brotar en nuestra vida, se trata de lo que venimos aprender a desarrollar cada uno de nosotros a este mundo, y lo que no se aprende por comprensión se aprende por dolor..3. Tienes que hacer este ejercicio todos los domingos, elige un lugar determinado, puede ser en tu casa, en el templo, en la iglesia, al levantarte, lo importante es el hábito de regar la semillita que has elegido.Ahora los pasos del ejercicio1. Ahora, ordenarás a tu mente que vas a cultivar esta virtud que has elegido como prioritaria, incluso cuando te sientas tentado a dejarla abandonada.2. Respira por la nariz, inhala y exhala, la atención tiene que estar en la respiración, como entra el aire por tus fosas nasales y como lo exhalas, siente el aire entrando y saliendo por tu nariz.3. Lleva la atención a tu pecho, y siente los latidos del corazón. Tomas conciencia que Dios está contigo, mantente firme en ese pensamiento.4. Pasas al sentir. Tienes que sentir lo que has elegido. Si quieres que florezca en ti la alegría, trata de sonreír en este preciso momento, y sientes la alegría dentro tuyo. Sientes como esos mismos rayos de luz que brotan del corazón de Jesús están brotando de tu corazón, son rayos de alegría, rayos que te llenan, cubren de alegría tu vida, tu entorno, esa alegría de ser consiente que Dios está contigo.Y verás como te transformas día a día. Cada virtud que logras cultivar te hace una persona considerada, amable con los demás.Colabora: María Benetti MeiriñoAutora de libros y guía para meditación. [email protected]





Discussion about this post