Señora Directora: Como no estoy en la política no tengo nada claro en qué se basan los concejales de cada municipio, ni los legisladores de cada provincia, ni los legisladores nacionales para determinar los fondos a destinar para cada sector y/o actividad administrativa. Es indudable que en 2014 los cálculos apuntaban en un 60% a las campañas políticas (descomunal derroche) que en el país dejaron todas las cajas vacías. El porcentaje más bajo fue para la salud y la educación, ¡con absoluta irresponsabilidad!Los hechos policiales o delitos cometidos en todas partes, indican claramente que para la inseguridad no había ningún peso.No sé qué cifras figuran en el presupuesto sancionado en 2015 para este 2016. ¿Las nuevas autoridades de los ministerios respectivos en el momento de asumir sabían los que les esperaba? ¿Cuántos pesos cuenta Defensa Civil de la Nación para hacer frente a las secuelas de las catastróficas inundaciones de los ríos Uruguay y Paraná? ¿Salud Pública cuenta con los insumos necesarios para afrontar la epidemia de dengue?Como era de esperar, los funcionarios y las autoridades del cristinismo hoy cuestionan todo lo que hace y no hace el actual gobierno, en lugar de cerrar la boca.Desde 1983 a la fecha todas las promesas preelectorales se basaban en Salud, Educación y Seguridad que, por absoluta lógica, deben ser tenidos en cuenta primero en los cálculos de cada presupuesto anual. Después Defensa Civil y demás necesidades. ¿Política, elecciones?: cero. Que cada postulante se las rebusque por donde pueda, de lo contrario seguiremos embarrados hasta el ombligo.





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