Al igual que en enero, las playas de Brasil recibirán un aluvión de misioneros durante el segundo mes del año. La devaluación del real hizo que las decisiones se tomaran prácticamente sin dudar y en buena parte de los destinos brasileños la presencia de turistas argentinos es moneda corriente. Muchos optaron por viajar por medios propios, pero también fueron numerosos los que prefirieron la tranquilidad y delegaron responsabilidades en las empresas de viajes y turismo.Para Daniel Vera, gerente de la empresa El Viaje de Tu Vida, “febrero viene con la misma cantidad de pasajeros que enero. Por lo general, en el segundo mes del año baja la cantidad de viajeros, pero como en esta ocasión las reservas se concretaron a última hora, en diciembre, después de la asunción del nuevo Gobierno y la implementación de las nuevas medidas, las ventas a Brasil explotaron. Como ya enero estaba vendido, lo que quedaba era febrero. Y ya no tenemos lugar por ningún medio”.El responsable de la empresa dedicada al turismo, remarcó que durante este verano “trabajamos muy bien para el destino Brasil, especialmente. En eso tiene muchísimo que ver la devaluación cada vez mas acentuada del real, que cada vez estás más desvalorizado con respecto al dólar. Entonces, ocurre que resulta cada vez es más barato ir a Brasil”. Vera destacó que “vendimos los cuatro destinos que fijamos de antemano, como Caiobá, Ponta do Papagaio, Canasvieras y Camboriú, que es donde nunca decae la demanda. Es, sin dudas, el destino favorito de los misioneros”.También hizo hincapié Vera en que desde El Viaje de Tu Vida “nos especializamos en playas del exterior y hacemos muy poco turismo interno, donde prácticamente no tuvimos demanda. Son muy pocos los misioneros que optan por veranear en la Costa Argentina, eso lo comprobamos año tras año y con el tema de la devaluación se acentuó aún más”. Adelantó el gerente que por el momento para el mes de marzo no hay una demanda extraordinaria como sí la hubo para enero y febrero. “Es una temporada que eligen los jubilados y algunas parejas sin hijos. Las vacaciones de verano son familiares, por lo general, y en marzo se calma una vez que comienzan las clases”, indicó.Sin sobresaltosPor otro lado, la epidemia de dengue instalada en el continente, con numerosos casos incluso de zika en Brasil, no influyó en absoluto en la preferencia de quienes eligieron las playas del vecino país para disfrutar de las vacaciones. “Realmente no tuvimos consultas por ese tema. De todos modos a los pasajeros se les recomienda que antes de viajar extremen las medidas de seguridad, más que nada las mujeres embarazadas. Pero no hubo ningún tipo de reducción de demanda por esos casos”. Sin ir más lejos, para febrero “tenemos un grupo que sale a San Andrés (Colombia) y la demanda se mantuvo normal. Nadie canceló su viaje por ese motivo ni tampoco nos cuestinaron algún tipo de inquietud al respecto”.Admitió Vera que la única preocupación que tuvieron fue por el virus y las playas contaminadas en Canasvieiras, que había sufrido el desborde de un arroyo y que había afectado durante el cierre de diciembre último el nivel de balneabilidad de esas aguas, pero que una vez que “la gente vio que la vida se desarrollaba normalmente en ese lugar y que la mayoría de las playas empezaron a habilitarse, la demanda se mantuvo normalmente”. Hace seis años que se encuentran en el mercado y fueron épocas con altibajos “porque los dos últimos años, con la presión de la percepción del 35% sobre los paquetes al exterior, era muy difícil trabajar. La demanda fluctuaba. Si bien el dólar estaba bajo, fluctuaba. Esta estabilidad nueva que estamos viviendo se esta reflejando en viajes”, relató.“Praias” y muy poco turismo internoJulio Gamarra, propietario de la firma Turismo Valle Hermoso, sostuvo que en enero se trabajó poco durante la primera quincena pero que hubo mejoras visibles en la segunda quincena. Para febrero, en tanto, mejoró mucho. “Tenemos mucha demanda para Camboriú, con ómnibus propios. Los viajes a ese destino se extenderán hasta la primera quincena de marzo. Es que se acomodaron un poco las cosas y la gente tiene un mejor panorama de lo que está pasando”. Pero el tema está en redoblar la apuesta hacia el país vecino. Muchos interesados ya están preguntando por Camboriú para la Semana Santa, y para mediados de año, los que no tienen compromiso laboral. Los destinos sugeridos también están dentro de la Argentina. Se destacan los paisajes cordobeses, salteños y mendocinos.Sin embargo, Mar del Plata no fue como esperaban. No presentó demanda. Incluso, menos que otros años. “El año pasado trabajamos muy bien pero los precios aumentaron considerablemente. La gente quiere ir a comer o a los teatros y está caro”, graficó.Un poco más arribaEn Guaraní viajes fueron exitosas las ventas tanto para el Sur como para el Norte de Brasil, aunque para el primero de los destinos fueron un poco mejores los resultados.“Febrero lo tenemos casi todo vendido. Nos esta quedando para la última salida que es el 21. Lo mas buscado fue Camboriú y Laguna. Pero también comercializamos muchísimo más al Norte como Río de Janeiro, Buzios, Salvador, por la diferencia de precios. La consigna era pagar un poquito mas que el Sur y viajar a un mejor destino. Tenemos fechas para marzo y ya estamos vendiendo”, comentó Victoria Semilla. “Tuvimos que dejar de vender el Canasvieiras porque durante la primera salida hubo varios pasajeros con problemas de salud. Entonces, decidimos apostar más a Laguna, Camboriú e Itapema, que colapsó y era la primera vez que tuvimos a esa ciudad como destino. Probamos y vendimos muy bien. Es una temporada exitosa, más de lo que nos imaginábamos”, remarcó.Precios tentadoresLo que más terminó seduciendo a los argentinos, y en especial a los misioneros, es la diferencia cambiaria existente con Brasil, lo que generó una alta demanda, superior a todos los años anteriores, tanto en agencias de turismo como también en forma privada. “Quienes viajaron en el verano de 2015 y habían conseguido los reales ‘blue’ habían pagado entre 5 y 5,50 pesos, en cambio ahora se consigue entre 4 y 4,30 y con tarjeta de débito termina siendo 3,70 pesos. Si a eso le sumamos que la inflación de Brasil no fue tanta, hay productos que cuestan más baratos que acá”, señaló Raúl Rodríguez, quien llegó de las playas catarinenses el pasado fin de semana.“Hubo días claves de inicio de quincena o de recambio, en que no había departamentos disponibles para alquilar y había que cambiar de destino sobre la marcha. Eso le pasó a muchos argentinos. Es por eso que algunos prefirieron asegurarse y contratar los servicios de hotelería mediante las agencias, de lo contrario era una lotería conseguir departamento en determinadas playas”, indicó Ramón Gómez, otro de los que veraneó en Brasil y comentó su experiencia propia. Agregó que &l
dquo;el buffet libre de comida, en Meia Praia, rondaba los 19 reales (80 pesos), los camarones a la milanesa unos 35 reales (140) y el pack de cervezas de Skol, con la promoción de pague 15 y lleve 18 latitas 36 reales (144). Los alquileres, en la segunda quincena de enero, en un departamento de dos dormitorios, ubicados a unas dos cuadras del mar, costaban entre 200 y 300 reales por día, dependiendo del confort. ¿Cómo no ir a Brasil?”, se preguntó Gómez.El precio de la nafta “aditivada”, siempre de acuerdo a la marca, cuesta entre 3,90 y 4,10 reales por litro, un precio que se asemeja mucho a los vigentes en Misiones.




Discussion about this post