ITUZAINGÓ, Corrientes (Especial). La investigación por el robo de 700 mil pesos de una estación de servicios de Ituzaingó, en Corrientes, terminó de cerrar en las últimas horas, una vez que los investigadores encontraron casi todo el botín enterrado en una finca de esa localidad.Como PRIMERA EDICIÓN informó en forma exclusiva hace poco más de una semana, uno de los integrantes de la banda fue detenido en la noche del viernes 7 de agosto cerca de la pieza que alquilaba en inmediaciones a la terminal de ómnibus de Posadas.Tras el pedido de colaboración de la Policía de Corrientes, sus pares de la Dirección de Investigaciones local y de la Saic montaron un operativo encabezado por el magistrado Ricardo Balor, titular del Juzgado de Instrucción 6, que aquella noche dejó tras las rejas al joven de 24 años.Casi en simultáneo, en Gobernador Virasoro, los policías correntinos apresaron a otros dos integrantes de la banda. El trabajo de inteligencia de los detectives de la provincia vecina permitió establecer que hay aún dos prófugos.Así las cosas, la última novedad se dio hace pocas horas, cuando los uniformados se toparon con casi todo el botín, que estaba enterrado en los fondos de una finca de Ituzaingó.El robo se produjo el sábado 25 de julio en una gasolinera emplazada sobre la ruta nacional 12, a metros del acceso a Ituzaingó.Los malvivientes llegaron al lugar por la parte posterior, lindera a un campo, forzaron una ventana y accedieron al sector de administración, donde se toparon con el efectivo, que estaba guardado en una caja fuerte. El trío permanece ahora a disposición del magistrado Néstor Anocíbar, titular del Juzgado de Instrucción de Ituzaingó.
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