POSADAS. En el reconocimiento, siempre detrás del médico pero en la práctica siempre a la par. Así ha sido la labor de la enfermería a lo largo de la historia. Pero como el resto de las profesiones, un día se rebeló y comenzó a conquistar espacios largamente postergados. En este contexto es que la Escuela de Enfermería de la Universidad Nacional de Misiones cumplió 40 años de trayectoria y lo festejó con visitas que engalanaron la ocasión.Silvina Malvarez y Ana María Heredia tienen una amplia trayectoria en el campo de la enfermería, egresaron en las primeras promociones de la carrera de licenciatura y brindaron una importante visión sobre la profesión en un escenario donde conviven viejas y nuevas problemáticas de salud. “La Licenciatura en Enfermería se creó en 1968 en la Argentina, así que llevamos casi medio siglo de desarrollo”, señaló Heredia en diálogo con PRIMERA EDICIÓN. “Estamos en la universidad hace 67 años, o sea que como carrera tenemos el mismo desarrollo que otras disciplinas como la educación o la psicología. La característica que tiene la carrera de enfermería es que siempre ha pensado en cómo va a colaborar en el cuidado de la salud de las personas”, agregó. Malvarez, por su parte, opinó “que hasta la creación de las Licenciaturas, la carrera de enfermería y la enfermería práctica era más una enfermería procedimental que necesitaba mucho desarrollo. Lo que pasó con la Licenciatura es que se le incorporó el componente de complejidad de la atención y el área de investigación. Esto significó un gran enriquecimiento para la profesión”, aseguró.Así fue. De un tiempo a esta parte la profesión de la enfermería ha ganado importantes espacios en el ámbito de la salud. “Estamos avanzando y hemos avanzado en la investigación del cuidado, en la atención y en la formación, porque tener 67 años en la universidad no es menor. Pero en el desarrollo histórico de Latinoamérica y del mundo, siempre enfermería ha estado muy ligada a otras profesiones, fundamentalmente al profesional médico, que en el mundo es hegemónica. En algunos países, enfermería se ha desligado pero en otros países, como el nuestro, ha estado subordinada. En este momento considero que no, ha superado esa etapa y se encuentra en condiciones de discutir de igual a igual con otros profesionales, no sólo los médicos, sobre el cuidado de la salud de las personas”, indicó Heredia. “Por otra parte hay dos cosas – agregó Malvarez- una es que la formación de enfermería desde sus inicios tuvo un componente que no tuvieron la formación médica y otras ciencias de la salud: la formación en salud pública, en salud comunitaria y en la administración y organización de hospitales. Esta es una gran capacidad de las enfermeras, que en muchas comunidades lideran centros de salud, porque se trata de la salud y no de la atención médica, eso es importante. La otra cosa es que se trata de cómo hacemos con más y menos poder, para ocuparnos de la salud de la gente. El tema del poder, de las corporaciones, la médica y la enfermería, su dificultad en las relaciones y todo lo demás es realmente secundario en función de lo que debe priorizarse que es la salud de las comunidades y de las personas”. El campo de la salud ha dejado descuidados ciertos grupos, los más importantes son los adolescentes, los ancianos y los niños de 0 a 3 años. ¿Qué puede hacer la universidad al respecto? “Enfermería tiene que tener la posibilidad y los fundamentos para poder atender a esos sectores, orientarlos en su cuidado y cuidarlos cuando sea necesario. En ese sentido se abre un campo importante porque esos sectores también han estado descuidados por la sociedad”, consideró Heredia.Malvarez, por su parte, señaló que “la universidad tiene una contribución a estos problemas de salud en la producción y diseminación del conocimiento. También tiene un rol protagónico de posicionamiento político frente a las situaciones críticas de salud de la población así como una capacidad de intervención práctica a través de los programas de extensión que muchos dan respuesta a comunidades completas y problemas complejos”, cerró. Sobre las profesionalesSilvina Malvarez es licenciada en Enfermería y doctora en Ciencias de la Salud. Oriunda de la ciudad de Córdoba, trabaja en la Escuela de Salud Pública de su provincia natal y ha sido por un período de once años la asesora regional de la Organización Panamericana de la Salud de las Américas. Es egresada de la primera promoción de licenciadas en enfermería en el año 1969.Ana María Heredia es licenciada en Enfermería y magíster en Salud Pública. Actualmente es la presidenta de la Asociación de Escuelas Universitarias de Enfermería de la República Argentina, además de directora de la Licenciatura en Enfermería de la Universidad Nacional de Quilmes en la provincia de Buenos Aires. Integra el grupo de asesores del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación y es coordinadora Nacional de Enfermería de la Argentina, trabajando en el Ministerio de Salud. Egresó en la segunda promoción de la carrera de Licenciatura en Enfermería en la ciudad de Córdoba, provincia de la que es oriunda.
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