BUENOS AIRES (DyN). La Cámara de Diputados comenzó a debatir en comisiones el proyecto de ley del Gobierno para declarar “de interés público nacional y como objetivo prioritario” la política de reactivación de los ferrocarriles de pasajeros y de cargas, el mejoramiento de la infraestructura y la incorporación de tecnologías al sistema, que en líneas generales cosechó el apoyo de la mayoría de los bloques opositores.El ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, concurrirá a brindar un informe y responder preguntas sobre el proyecto el próximo martes 31 de marzo a las 14 y mañana, desde las 13, las comisiones celebrarán otra reunión para recibir a especialistas, representantes empresarios y de los trabajadores para den su parecer sobre la iniciativa. La presidenta de la comisión de Transporte, María Eugenia Zamarreño (FPV), quien presidió la reunión conjunta que compartió con las comisiones de Obras Públicas y de Presupuesto y Hacienda, explicó el plan de trabajo que culminará la semana que viene con la firma del dictamen que el kirchnerismo quiere tratar en una sesión especial el 8 de abril.Al momento de fijar posiciones, el PRO a través de Federico Sturzenegger ratificó que en el partido “tenemos una visión bastante favorable” del proyecto y propuso que la modalidad de “open access” (acceso abierto), considerada en los artículos 2 y 4, se aplique también al transporte de pasajeros y no solamente al de carga. Por otra parte, el diputado advirtió que “no tiene lógica que al operador de transporte de pasajeros se le dé el control de las vías”, porque entiende que eso tendría que estar a cargo de quien maneje la estructura de vías.El radical Miguel Ángel Giubergia dijo no entender la razón por la que no se declaran en el texto a los ferrocarriles “servicio público” y preguntó por qué “se excluyó a los usuarios del directorio de la empresa”, pero en líneas generales adelantó que “es voluntad y vocación de este bloque acompañar este proyecto del Poder Ejecutivo”.La nota discordante la dio Néstor Pitrola, del Frente de Izquierda (FI), quien sostuvo que “el crimen de Mariano Ferreyra puso en evidencia el negociado ferroviario” y aseguró que el proyecto del Poder Ejecutivo “garantiza la más absoluta impunidad de los grupos empresarios en todo esta política antinacional ferroviaria”, por lo que anticipó la presentación de un dictamen de minoría con un proyecto alternativo al del oficialismo.Claudio Lozano (Unidad Popular) confió que su bloque tiene “una actitud favorable respecto de la decisión de que el Estado tenga el control sobre la planificación ferroviaria” pero apuntó que “vemos que el proyecto es sumamente débil en lo que hace al embate contra los concesionarios”.Carlos Heller (Frente Nuevo Encuentro), aliado del kirchnerismo, elogió el proyecto que estimó necesario para cerrar la etapa que se inició en 1958 cuando, recordó, “se le dio preponderancia al transporte automotor” en detrimento del ferroviario.
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