POSADAS. Con la presencia de Leo García, el programa que lleva la experiencia de consagrados artistas del rock-pop nacional cumplió su cuarta etapa. Apreciaciones acerca de la actualidad de la música, anécdotas varias y un consejo dado a la gran cantidad de jóvenes y niños que se hicieron presentes en el salón parroquial de la avenida Chacabuco: “Hay que estudiar”.Más acostumbrado a las peregrinaciones o a los parroquianos comprando frutas y verduras en su feria, el tradicional barrio del oeste posadeño vivió una intensa tarde de jueves con uno de los principales exponentes del pop nacional. Leo García, guitarrista fetiche de Cerati y sus Soda Stereo, el también productor de bandas transmitió sus conocimientos y experiencia a un nutrido grupo de jóvenes y niños que concurrieron al salón parroquial.Así, Clínica 13, el proyecto encarado por el Ministerio de Desarrollo Social en conjunto con los Músicos Populares de Misiones (MPM) sigue adelante con este propósito que apunta a democratizar el acceso a la información de los jóvenes amantes de la música, que así tienen la oportunidad de conocer “la otra historia” de artistas consagrados que, alguna vez, vieron en la música sólo un sueño. El común denominador de los artistas que hasta ahora participaron del proyecto es: “la fama y la consagración no llegan de la noche a la mañana. Para lograr el éxito hay que tener constancia, dedicación y, sobre todo, hay que estudiar”.Previamente, en la conferencia de prensa brindada durante la mañana en la sede del MPM, García se refirió a Clínica 13. “Me parece muy importante que se produzcan hechos como esta clínica que lleva artistas hacia los sectores más postergados o barrios más alejados. Especialmente en estos tiempos en que se difunde tanto la inseguridad y que siempre está ligada a la gente que por ahí no tiene la posibilidad económica o tiene más carencias. Estos eventos aportan entusiasmo a un joven que tal vez no sabe bien qué hacer, y quitar esa imagen de que el que llegó a algo en la música lo hizo por acomodo o por alguna cosa que no tiene nada que ver con el trabajo. Hay que comunicar que para llegar hay que trabajar. Hoy tengo la suerte de estar acá y que me traten como un maestro, pero sólo soy un músico y un cantante pop. Entonces… se puede”.Un punto altamente emotivo y que despertó el aplauso a manera de homenaje fue cuando inevitablemente se tocó el tema de la reciente partida de Gustavo Cerati, quien fuera su amigo personal y el gran disparador de su carrera cuando, allá por los tempranos ‘90, al frente de Avant Press, su banda de pop electrónico, le abrió los recitales en la fastuosa despedida del gran trío en el estadio de River Plate.“Los sucesores de Soda Stereo” fue el cartel que le colgaron a la prometedora banda, pero sin embargo… “Sí, fue un poco sorpresivo porque cuando parecía que Avant Press subía hasta el cielo, decidí disolverla”, relató. “Se estaba dando muchos cambios en la banda, y sentí que era el único que la mantenía viva. Me pareció que ya no era su momento y que debía encarar una carrera como solista. Así decidí comenzar de nuevo”. Volviendo a la partida del ícono del rock nacional que permaneció dormido por cuatro años, García se refirió: “Todavía estoy conmovido por lo de Gustavo. Un artista de vanguardia que dejó un gran material musical”.





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