POSADAS. En una nota dirigida a Gloria Godoy, directora del Instituto Madre de la Misericordia, un grupo de padres de alumnos del cuarto grado sección “C” del turno mañana plantearon al colegio “una serie de hechos que nos preocupan inmensamente del ámbito escolar”.Para entender el reclamo, hay que volver al 7 de mayo, cuando los padres fueron notificados por nota que “de manera preventiva y dando mayor tranquilidad a las familias, desalojarían el sector lindante” a la obra del edificio de departamentos que se levanta sobre la calle San Luis casi Tucumán.Por este motivo, los niños de cuarto grado fueron reubicados fusionando las secciones “B” y “C”. Según los padres, “eso sería temporal hasta la solución del problema edilicio, situación que lleva tres meses”. Con la fusión, quedó un aula “con un gran número de niños: 70, donde se dan clases con micrófono, afectando el rendimiento y aprendizaje académico de nuestros hijos. No es una universidad, son niños de nueve años que necesitan atención personalizada para un óptimo aprendizaje”, expresaron en la misiva los padres firmantes.En la nota a la que accedió PRIMERA EDICIÓN, recordaron a la directora Godoy que el artículo 28 de las normas de convivencia establece que la formación se imparte “tratando en cada uno de los ciclos de ofrecer una atención personalizada”.Los padres revelaron una reunión realizada el pasado 4 de agosto con la vicedirectora Graciela Rodríguez, “quien al planteársele el problema nos manifestó que cada padre sabe lo que tiene que hacer, invitándonos a que saquemos a nuestros hijos del colegio, frase desafortunada que generó mayor tensión”.Si algo faltaba, según los padres firmantes, es que la docente de los 70 alumnos “hiciera una especie de encuesta a nuestros hijos, preguntándoles quién quería continuar con el grupo todos juntos (los 70) y quiénes no, haciéndoles consignar nombre y apellido en un papel con la respuesta. Surgiendo de ello que sólo tres alumnos no querían continuar en el aula con los 70 compañeros, los demás dijeron que sí. A raíz de ello, la maestra les expresó que -como la mayoría quiere continuar así- pues seguirían hasta fin de año” con esa modalidad, denunciaron en la carta.PropuestasLos padres ratificaron en el escrito su planteo con posibles soluciones “como ser: dividir la sala de reuniones para tener dos salones, o que sea rotativo, haciendo que un mes estén juntos otros grados, a los fines de no atrasar tanto a los cuartos grados. Como respuesta nos dijeron que en quince días se solucionaría esta problemática, una vez que se expida el Juzgado que tiene en trámite la causa” de la construcción del edificio contiguo.Los padres temen que “si el órgano judicial se expide (a favor de) que ocupen el área desalojada, dejaríamos a nuestros niños en un lugar que no genera la más mínima situación de seguridad edilicia”.Finalmente, solicitaron “una pronta solución a la problemática planteada”, con la posibilidad de efectuar el mismo planteo ante el Servicio Provincial de Enseñanza Privada de Misiones (Spepm).Si bien un solo padre fue convocado por los directivos, no quedó conforme con las explicaciones y, al intentar profundizar en la cuestión, recibió -dicen los firmantes- la misma respuesta: a quien no le guste, sabe lo que tiene que hacer, en referencia a sacar a su hijo del establecimiento de gestión privada.




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