BUENOS AIRES (NA). El vicepresidente Amado Boudou aseguró que ni él ni el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, hicieron “nada ilegal” con la empresa Ciccone Calcográfica y sostuvo que el acta que presentó a la Justicia la hija del fallecido socio fundador de la imprenta, Héctor Ciccone, “es trucha a todas luces”.Boudou remarcó que el documento que aportó Graciela Ciccone, en el que se menciona una reunión entre él y su padre para negociar la compra de la empresa, está firmado por un escribano que “hace un año atrás” había “declarado bajo juramento” ante el juez Ariel Lijo que “jamás nadie de esa familia le había nombrado a Amado Boudou”.“La hija de Ciccone efectivamente presenta un acta, que tiene certificación de firma de escribano. Un escribano que un año atrás, el mismo día de febrero del año pasado, declaró bajo juramento ante el juez Lijo y dijo que él hacía trabajo para los Ciccone pero jamás nadie de los Ciccone ni de la familia Ciccone les había nombrado a Amado Boudou ni a (José María) Núñez Carmona”, subrayó.En este camino, el titular del Senado subrayó que “no hay ninguna prueba de lo que dicen”, ya que el documento presentado el martes con declaraciones de Héctor Ciccone “es trucho a todas luces” e insistió en que “nunca” se reunió con ellos.“Están jorobando con un muerto”, remarcó en alusión al socio fundador de la empresa, al tiempo que ratificó que “se presentará desde el minuto cero” a declarar si llegara a ser citado a indagatoria por el juez Lijo.Boudou sostuvo que “la familia (Ciccone) es capaz de truchar algo de una persona que falleció y ya no se puede corroborar” y opinó que “esto es tremendo desde el punto de vista de lo que puede hacer la gente por plata y por poder”.“Los Ciccone no encontraron a quien corromper. Si me hubieran corrompido, hoy seguirían haciendo los documentos y los billetes y no tendría ninguna causa penal”, remarcó Boudou.En declaraciones a varias radios y a través de Twitter, Boudou se defendió así frente a la acusación de haber interferido para levantar la quiebra de Ciccone y propiciar el desembarco de la firma The Old Fund en esa empresa.“Ni Amado Boudou ni Ricardo Echegaray hicieron nada que no pudieran hacer.En este sentido, explicó que “lo único” que hizo es “mandar una nota a Echegaray para pedirle que en el marco de su competencia se pudiera fijar” un beneficio impositivo a la empresa, pero “sin ningún perjuicio para el fisco”, lo que quiere decir “que no le den una quita ni nada que no le puedan dar”.





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