SAN VICENTE. La gran cantidad de lluvia caída en poco tiempo los primeros días del año, más de cien milímetros en una jornada, puso en evidencia que sin las obras complementarias la canalización del Zanjón de la Muerte va a ser inútil. La correntada que baja por las calles en ambas márgenes del arroyo no tienen lugar para correr y forman nuevos zanjones.Los primeros días de este 2014 estuvieron marcados por la gran cantidad de lluvia que se precipitó en la Zona Centro de Misiones. En San Vicente, entre el 3 y el 4 de enero cayeron más de 170 milímetros. Las zonas más bajas de la ciudad tuvieron serias consecuencias. El agua llegó a meterse dentro de las casas. Si bien no hubo perjuicios ni se tuvo que evacuar a ningún vecino porque el agua bajo rápido, dejo las casas llenas de barro.Cuando se hizo la presentación de la obra, que financia Vialidad Provincial, en marzo del año pasado, el intendente Waldomiro Dos Santos aclaró que era únicamente para el canalizado del arroyo. Las palabras del alcalde dieron a entender que estaba buscando la financiación para las obras complementarias. Esos trabajos de los que hablaba Dos Santos eran la construcción de cordón cuneta y empedrado para las calles que se cruzan con el curso de agua.El pequeño arroyo que nace en el medio de una manzana y tiene varias vertientes corta varias calles. Cada una de ellas viene de por lo menos cinco cuadras de cada lado y traen el agua de una tercera parte de la ciudad. Esa agua, que tenía su curso natural y utilizaba el canal del arroyo para escurrirse, encuentra el canal cerrado y busca la manera de seguir el curso. Lo hace en una parte por encima del hormigón que hace de techo del arroyo y en una parte se escapa por el costado y forma una nueva zanja al lado de la construcción, y se mete también en las casas lindantes.El propio presidente de Vialidad Provincial, Julio Duarte, sostuvo durante la presentación del comienzo de la obra que sólo estaban contemplados el entubado del curso de agua en las partes de las manzanas y luego en la parte del baldío se construirá un desagüe a cielo abierto. Y remarcó que no se iba a hacer ninguna obra complementaria. Esto indica que no se construirán bocas de tormentas en las desembocaduras de las calles.En la intersección de las calles Congreso y Azurduy, la obra está lista y el canal, cerrado. No hay un lugar abierto para que ingrese el líquido al túnel y el agua que baja de ambas márgenes se escurre por arriba hasta que en el cruce con Eva Duarte se desborda y la corredera cae de la construcción y forma una nueva zanja casi del mismo tamaño que estaba antes de la construcción del entubado.La arteria más complicada es la Eva Duarte, que tiene más pendientes que las otras y es donde muestra la dificultad que presenta la obra.Según el alcalde de la Capital Nacional de la Madera, iba a conseguir el financiamiento de las obras complementarias. Hasta ahora no se dio a conocer ningún aviso al respecto. La construcción en el Zanjón de la Muerte está parada por el período de vacaciones de los obreros y en los próximos días van a retomar la construcción. Se calcula que en total se invertirían allí unos 20 millones de pesos.





Discussion about this post