PRESIDENCIA ROQUE SÁENZ PEÑA (Chaco). Fue detenido ayer por falso testimonio el escribano Osvaldo Torres (75), exintendente de Posadas, en el marco de la octava jornada del juicio por el doble homicidio de Manuel Roseo y Nélida Bartolomé, según publicó la prensa chaqueña. Se cree que Torres fue el encargado de certificar las firmas del terrateniente asesinado y del principal imputado en el caso, el misionero Raúl “Gusano” Menocchio, en un boleto de compra-venta. “Roseo se presentó con Menocchio y Romero en mi estudio. Vino a verme porque quería que le certifique unas firmas para una compra de tierras en Chaco y Formosa”, señaló en calidad de testigo el escribano, quien luego aseguró al Tribunal y a las partes que el instrumento de venta ya lo recibió redactado y que nunca vio dinero ni un maletín en el momento que se estaba certificando las firmas. “No recuerdo si era por un monto de 20 o 200 millones de dólares. Lo que recuerdo es que no se pidió la aplicación de impresión dígito pulgar”, recordó. El abogado querellante Carlos Del Corro dijo que de esta forma se va demostrando “la falsedad de la pista de la venta y por ende se va consolidando la necesidad de que el homicidio se realizó para asegurar esta venta”. Al ser consultado sobre como conocía a Menocchio, Torres dijo que “de un tiempo atrás, porque había ido a su oficina para solucionar algunas cuestiones referidas a la regularización de los terrenos del establecimiento de su padre”. El escribano fue avanzando en otros aspectos relacionados a su intervención para la concreción de la compra y primero se contradijo con las fecha en que se enteró del crimen y luego en la cantidad de modelos de instrumento se le habían presentado para efectuar la operación y en la fecha en que había visto a Menocchio. Éstas y otras situaciones derivaron en su detención, agregó la misma fuente. Apresados en el juicio El ex intendente de Posadas, Osvaldo Torres, no es el primer detenido en el juicio por el crimen de Roseo, ya que Ángel Antonio Romero había prestado declaración durante la investigación en carácter de conocido de Raúl Menocchio y también, por contradicciones, terminó tras las rejas. Romero comenzó por explicar cómo conoció a Menocchio y cuál era la relación que tenían. Aseguró haber estado en Ituzaingó (Corrientes), con el imputado, pero no pudo precisar las fechas. A partir de ese momento, a medida que era interrogado por el fiscal y los abogados querellantes, las incongruencias del testigo se multiplicaron. El cuerpo de Roseo fue encontrado en su vieja casona en la localidad de Castelli (Chaco), el 13 de enero de 2011, junto al de su excuñada Nelly Bartolomé. Fue golpeado y luego asfixiado con una bolsa de plástico que le pusieron en la cabeza, y que luego hicieron lo mismo con la mujer, una docente jubilada que lo acompañaba. En los próximos días declarará como testigo un conocido abogado de Posadas, quien debió haber comparecido ayer, pero no pudo hacerlo por problemas de salud.




Discussion about this post