Nancy Calderón
Coach The John C. Maxwell
Whatsapp 3764293817
Finalizar un año implica mucho más que cerrar una agenda o cumplir un calendario es un momento profundo de revisión personal y liderazgo interior, donde cada experiencia vivida se transforma en una oportunidad de aprendizaje cuando nos detenemos a observarla con honestidad y sin juicio.
El crecimiento ocurre cuando somos capaces de mirar lo que pasó y reconocer no solo los logros visibles sino también las decisiones difíciles, las conversaciones pendientes, los límites que aprendimos a poner y las emociones que logramos gestionar mejor. Liderarnos a nosotros mismos significa hacernos responsables de ese proceso interno que, muchas veces, nadie ve pero que define quiénes somos y cómo actuamos.
Cerrar ciclos es un acto de madurez emocional porque no todo lo que comienza debe continuar y no todo lo que duele fue una pérdida. Cada experiencia deja una enseñanza cuando estamos dispuestos a aprender de ella, soltar no es resignarse, es elegir conscientemente qué llevamos con nosotros al Nuevo Año y qué dejamos atrás para avanzar más livianos.
El liderazgo consciente nos invita a transformar errores en aprendizajes y desafíos en crecimiento personal, preguntarnos qué actitudes queremos sostener, qué hábitos necesitamos cambiar y qué vínculos deseamos fortalecer nos permite iniciar el nuevo ciclo con mayor claridad y coherencia entre lo que pensamos, sentimos y hacemos.
Ritual práctico de cierre y bienvenida
Buscá un espacio tranquilo tomá una hoja y escribí tres situaciones del año que te hayan marcado. Luego, al lado de cada una, anotá qué aprendiste de ellas, aunque haya sido incómodo o desafiante. Después escribí tres cosas que decidís soltar, pueden ser creencias, exigencias, miedos o expectativas que ya no te representan.
Por último, definí una intención para el Nuevo Año enfocada en cómo querés liderarte más, en lo que querés lograr; este ritual simple ayuda a cerrar con gratitud y abrir un nuevo comienzo con propósito.
Cada cierre consciente fortalece nuestro liderazgo personal porque nos permite avanzar con mayor equilibrio, presencia y dirección. El Nuevo Año no empieza con metas, comienza con decisiones internas que nos preparan para crecer de manera sostenida.








