Luego de una dura lucha contra una enfermedad, falleció una de las grandes deportistas que vio la Tierra Colorada, a los 52 años de edad: Rosa Beatriz Floriano.
La partida de Rosa dejó un gran vacío en el deporte misionero, pero siempre quedará grabada en la memoria colectiva su legado. Fue campeona mundial de pesas en Iguazú, en 2011, con récord incluido y siempre de destacó en todo lo que hizo, como por ejemplo el culturismo y fitness, o la pintura, otra sus grandes virtudes.

Las redes sociales se inundaron con mensajes de familiares, amigos y personas que la conocieron. Todos destacaron su carrera como deportista y sobre todo a la persona. No faltaron los mensajes de apoyo para sus seres queridos. Incluso el esposo de Rosa, Walter Plaza, otro reconocido deportista que la acompañó hasta el último día, le dedicó unas sentidas palabras en sus redes sociales.
Este martes, allegados le dieron el último adiós en Casa Cúneo y mañana miércoles será trasladada al crematorio.





