Un proyecto desarrollado por estudiantes de tercer año de la Escuela de Comercio (EPCE) 19 de Eldorado fue seleccionado por la Coordinación General de la Feria de Educación, Arte, Ciencias y Tecnología 2025 para participar en la fase nacional del eje Arte, sumándose a las 4 iniciativas elegidas para representar a la provincia.
Se trata de “La armonía del juego”, una propuesta diseñada por el 3° año G de la orientación Música, que surgió inspirada en el ajedrez y bajo el interrogante sobre si es posible combinar el arte, el juego y el deporte a través de estas dos actividades. Para la fase nacional, que se desarrollará del 3 al 6 de octubre en Posadas, fue elegida como trabajo invitado.
La profesora de Historia y docente asesora del proyecto, Laura Ibañez, comentó en diálogo con PRIMERA EDICIÓN que se trata de “un trabajo que parte de la inquietud” y de un repaso de la historia institucional de la EPCE, con el objetivo de recuperar un espacio de talleres sobre ajedrez con el que contaba hace una década.
Investigar a partir de un interrogante
Los 26 estudiantes de 3° G trabajaron desde abril en este proyecto de investigación y composición musical y audiovisual, después de conocer en sus clases de Historia que el ajedrez era una actividad muy practicada en la escuela hace una década atrás, con talleres dictados por docentes de la EPCE.
“La escuela como institución participó y tiene una larga trayectoria dentro del ajedrez, que además de un juego es considerado por muchos como un deporte. Muchos de los estudiantes de años anteriores, participaron en competencias de esa actividad, y cuando los chicos leyeron esta parte de la historia institucional comenzaron a indagar un poquito más”, contó Ibañez.
El dato inspiró a los estudiantes a combinar la música, disciplina troncal de su orientación, con esa actividad que practicaban hace tiempo en la escuela. Se plantearon entonces como objetivo crear una composición musical inspirada en el ajedrez, pero también recuperar la práctica de ese juego-deporte.
Para hacerlo, investigaron la historia del ajedrez, cómo se juega y la creación de jugadas y movimientos típicos. También crearon una base instrumental a partir de una aplicación que combina el sonido de distintos instrumentos.
“Después crearon una canción y finalmente grabaron un video. Así pudieron corroborar su hipótesis de que era una combinación posible, Algunos se dedicaron a elaborar el stand, otros a la parte del instrumental o actuaron en el video, es un trabajo de todo el curso y dos chicos exponen los resultados”, indicó Ibañez.
“Pensar desde el propio lugar”
En el proyecto estuvieron implicadas tres asignaturas, Música, Lengua e Historia, que desarrollaron en clases distintas etapas del trabajo, desde un enfoque interdisciplinario.
Al respecto, Ibañez mencionó que “para los tiempos que corren, es fundamental integrar los conocimientos y contenidos de cada espacio, porque permite pensar de un modo diferente los fenómenos sociales, razonar de un modo distinto, ampliar y resignificar saberes de los estudiantes y de las personas en general”.
También aseguró que el proyecto permitió trabajar de manera situada con el curso, ya que el abordaje de la historia institucional desde el presente “los ayudó a pensar desde el territorio, desde su propia comunidad”.
Para la docente, “la ciencia tiene que ver mucho con eso, con trabajar en comunidad. Hay muchas personas haciendo ciencia, tratando de resolver problemas y mejorar la sociedad en la que vivimos, por eso es fundamental pensar desde nuestro lugar”.
Por ese motivo, el objetivo del proyecto trascendió la pieza musical y se convirtió en la intención de recuperar un espacio de práctica del ajedrez como juego compartido y con “volcar lo que ellos aprenden en su comunidad, en su barrio y en un montón de lugares donde ellos conviven”, cerró Ibañez.








