Hay cadenas que no se ven, pero que pesan más que el hierro. Son pensamientos que nos limitan, creencias heredadas, culpas antiguas y miedos que se visten de prudencia. Las llevamos tanto tiempo que creemos que forman parte de nosotros, hasta que un día te das cuenta que todo eso no eres tú. Romper cadenas no es un acto violento, sino un gesto de amor propio. Es atreverte a cuestionar lo que siempre diste por cierto. Es dejar de pedir permiso para ser tú. Es comprender que la vida no te ata, te espera. Y que esas cadenas no son más fuertes que tu decisión de ser libre.
Crear alas es el siguiente paso. No basta con soltarse: hay que volar. Y volar implica confiar en que el viento de la vida te sostendrá. No esperes a que todo esté perfecto para desplegar tus alas; la verdadera magia ocurre en pleno vuelo, cuando te das cuenta de que naciste para la altura.
La libertad no se conquista una sola vez, se elige cada día. Y cada vez que eliges ser libre, tu luz se expande, tus pasos se vuelven firmes y tu corazón recuerda que siempre tuvo cielo para recorrer. La libertad es un proceso continuo, un camino que se recorre día a día.
Y cada vez que te enfrentas a una decisión, puedes elegir ser libre. Puedes elegir dejar ir lo que te ata y volar hacia lo desconocido. Puedes elegir confiar en ti mismo y en la vida. La libertad es un estado de ánimo, una forma de vivir y de ser. Recuerda que la libertad es un derecho que todos tenemos. Es un derecho a ser nosotros mismos, a vivir nuestra vida de manera auténtica y plena. Así que no te conformes con menos. No te conformes con vivir una vida que no es tuya. En su lugar, elige vivir una vida que te haga feliz, una vida que te permita ser tú mismo.
La libertad es un regalo que te haces a ti mismo. Es un regalo de amor propio, de autoconocimiento. Es un proceso que requiere esfuerzo y dedicación, pero que también es muy gratificante. Cuando te sientes libre, puedes vivir de manera auténtica y plena. Puedes ser tú mismo, sin miedo a ser juzgado o rechazado.
Suelta lo que ya no te deja respirar y ábrete al infinito. Las cadenas se rompen con conciencia; las alas crecen con fe. No te rindas ante la adversidad, no te dejes llevar por el miedo. En su lugar, elige ser valiente, elige ser libre. Ábrete al infinito y deja que tu espíritu vuele y crea tu vida propia historia, crea tu propia vida.
Karina Holoveski
Mujer Medicina-Chamana.
Whatsapp: 3765-110223








