
El partido entre Independiente y Universidad de Chile por los octavos de final de la Copa Sudamericana fue cancelado por la Conmebol tras violentos incidentes en las tribunas del estadio Libertadores de América-Ricardo Enrique Bochini, en Avellaneda.
La noche se vio marcada por enfrentamientos prolongados, el ingreso de barras a la tribuna rival y escenas de violencia que derivaron en la intervención de los organismos de seguridad y la decisión poco habitual de la Confederación Sudamericana de Fútbol de cancelar —y no suspender— el encuentro.
El saldo de la barbarie, hasta este jueves por la mañana, es de al menos 23 heridos, entre ellos dos chilenos en grave estado internados en el Hospital Fiorito. Según informaron fuentes con acceso a la investigación, esas personas ingresaron con traumatismos craneoencefálicos graves, con fracturas y hundimiento, e incluso una de ellas presentaba tres cortes en la cabeza.
“Ambos se encuentran en la unidad de terapia intensiva aguardando su evolución”, añadieron. Uno de ellos fue identificado como Gonzalo Alfaro, que sufrió heridas de gravedad al caer (o ser empujado) desde la tribuna alta del estadio.
En tanto, cinco personas lastimadas, una de ellas apuñalada, fueron atendidas en el Hospital Perón, mientras que otras cuatro, que ya fueron dadas de alta, recibieron los primeros auxilios en el Hospital de Wilde por politraumatismos.
Cancelación, no suspensión
“La Dirección de Competiciones y Operaciones de la CONMEBOL informó que en función a la falta de garantías de seguridad por parte del club local y de las autoridades locales de seguridad, que garanticen la continuidad del partido entre Independiente (ARG) y Universidad de Chile (CHI) por la Octavos de Final de la CONMEBOL Sudamericana 2025, dicho encuentro queda cancelado”, comienza el comunicado de la Conmebol.
Asimismo, tras la cancelación del duelo, “el caso será derivado a los Órganos Judiciales de la CONMEBOL para futuras determinaciones. Toda información de los hechos ocurridos dentro y fuera del estadio será enviada a la Comisión Disciplinaria de la Confederación Sudamericana de Fútbol”, concluyó.
De esta manera, la Confederación Sudamericana de Fútbol dejó claro en su comunicación oficial la decisión de cancelar el partido y no solo suspenderlo temporalmente, como ocurre habitualmente. Esto implica que la reanudación queda descartada y el resultado del cruce quedará sujeto a una investigación disciplinaria sobre lo ocurrido en Avellaneda.
Aunque todavía queda un largo camino de investigación, primeras versiones a las que accedió TyC Sports indican que los dos clubes podrían ser descalificados del torneo, además de una posible expulsión del plano internacional por todo el 2026.
son unos enfermos de mierda, espero que Conmebol les meta una sanción de 20 años pic.twitter.com/bxpiApP6TE
— Flower Slave 🇸🇪 (@____JR10____) August 21, 2025
Noche violenta
Todo comenzó con el lanzamiento de proyectiles por parte de los hinchas visitantes desde la tribuna Pavoni Alta hacia los simpatizantes locales ubicados en la popular baja, además de arrojar bombas de estruendo y provocar destrozos en los baños y otros sectores del estadio. Un operativo de 650 policías y más de 150 agentes de seguridad privada no logró contener la violencia, y tras varios avisos por los altoparlantes, la autoridad ordenó desalojar la tribuna visitante.
A pesar de que la situación en un primer momento no interrumpió el desarrollo del partido, la tensión escaló cuando integrantes de la barra de Independiente ingresaron a la zona donde se encontraba el público de la Universidad de Chile. Esta secuencia, documentada por cámaras y testigos en el estadio, agravó el clima hasta derivar en la intervención arbitral y policial.
A los cuatro minutos del segundo tiempo, el árbitro Gustavo Tejera detuvo definitivamente el encuentro, mientras en las tribunas se registraban corridas, agresiones, destrozos e incluso la caída de un hincha desde gran altura en plena confusión. En el campo de juego y en las inmediaciones del estadio, la incertidumbre se extendió durante una hora hasta la decisión de cancelar el partido por parte de autoridades de seguridad y Conmebol.
Partido cancelado entre Independiente y Universidad de Chile. pic.twitter.com/hXB1PCPuoe
— CONMEBOL Sudamericana (@Sudamericana) August 21, 2025
Las imágenes de la noche mostraron la evacuación desordenada de hinchas visitantes, la irrupción en las tribunas, y secuencias de violencia dentro y fuera del estadio. Los videos captaron escenas de tensión, agresiones y momentos de desesperación tanto en el público local como visitante.
Este episodio se suma a una reciente advertencia que la Conmebol había dirigido a la Universidad de Chile por incumplimientos previos en materia de seguridad y comportamiento de sus hinchas en competencias internacionales. Fue a fines de julio cuando el equipo chileno recibió un apercibimiento de la Conmebol.
De acuerdo a información suministrada por la U. de Chile, en las primeras horas de este jueves 97 simpatizantes chilenos permanecían detenidos en la comisaría cuarta de Avellaneda debido a los violentos incidentes. Las mismas fuentes indicaron que ningún integrante del plantel del equipo, ni funcionarios ni familiares sufrió lesiones.
Fuente: Infobae, La Nación, TyC Sports.






