Un total de 5.181,75 kilos de marihuana distribuida en 5.641 ladrillos fue el pesaje final de un cargamento frustrado el pasado viernes por la tarde entre la Policía de la Ciudad de Buenos Aires y la Dirección General de Aduana, cuando detectaron circulando por la ruta nacional 12 a su paso por Entre Ríos a un medio de transporte extranjero proveniente de Misiones y -según información obtenida por los pesquisas- con destino a una villa del conurbano bonaerense.
A partir de lo instruido por orden del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Nº4 a cargo de Ariel Lijo, policías y aduaneros, realizaron un seguimiento controlado del camión con el fin de determinar la existencia de otros vehículos y/o personas involucradas que estuvieran prestándole apoyo logístico.
En un momento dado, el conductor sospechosos comenzó a modificar las velocidades y a realizar maniobras de conducción indebidas, por lo cual se implementó un “operativo cerrojo” para detener su marcha en forma inmediata e identificar al chofer, además de realizar los controles del vehículo y la carga a bordo.
El nerviosismo del hombre fue en aumento conforme el personal actuante le solicitaba la documentación aduanera respaldatoria, la cual después se pudo determinar que -al igual que el precinto que protegía la intregridad de la carga- eran apócrifos.
El Juzgado interviniente ordenó la apertura del camión y el semirremolque, de la cual surgió la presencia de 233 bultos de diversos tamaños, que al ser sometidos a la prueba narcotest dieron positivo para cannabis sativa.
Tras trasladar todas las acciones del caso hacia la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, entre el final del sábado y las primeras horas de este domingo se contabilizaron más de 5.600 “panes” de marihuana con más de 5.100 kilos de peso, que tendrían un valor de mercado estimado en torno a los 750 millones de pesos.
Por orden del Juzgado, el conductor de nacionalidad brasileña y de 49 años de edad permanece detenido en carácter de incomunicado.
Cabe destacar que tanto el medio de transporte como su conductor tienen vinculaciones estrechas con la organización dedicada al tráfico internacional de estupefacientes que el año pasado sufrió dos incautaciones récord por parte la de Policía de la Ciudad de Buenos Aires en conjunto con la Aduana, donde se detectaron más de 7.000 kilos de marihuana precintados con los logos “Messi”, “Patrón del Mal” y “Verdelandia”, entre otros.