Viajar tiene su magia pero la increíble expedición de la que hablaremos hoy, sin lugar a dudas es única.La Cueva Son Doong o la Cueva más grande del mundo le dará una oportunidad maravillosa para sentirse un auténtico explorador.Los entusiastas de la fotografía y profesionales por igual, disfrutarán como nunca antes la posibilidad de capturar postales de un lugar al que no muchos se atreven a entrar.Este viaje es sumamente complejo y es eso, además de la belleza del lugar, lo que le da valor agregado a la expedición. La Cueva Son Doong es una obra maestra de la naturaleza con paisajes del otro mundo, estalagmitas enormes y estatuas estalactitas – colgando del techo y levantándose desde el suelo como una especie extraña. La selva real dentro de la cueva le sorprenderá en todos los sentidos, mientras que las nubes brumosas envuelven la escena. El pasaje fósil le dará la oportunidad de entender la formación de esta piedra caliza antigua.Una aventura de principio a fin ya que se utilizan cuerdas para subir a la entrada y a la Gran Muralla de Vietnam, una pared de calcita de 90 metros de altura.La expedición no es una carrera, por lo que no debe esperar a correr en esta gira. Habrá mucho tiempo para la fotografía y para explorar la cueva. Sin embargo, todos los aventureros se espera que estén en forma, y ??tengan alguna experiencia de trekking anterior (no necesariamente la experiencia de escalada o espeleología).La historia de la Cueva Son Doong dice: “El granjero local Ho Khanh caminaba por un frondoso tramo en el corazón del parque nacional, un lugar por el que había pasado muchas veces antes, por lo que no iba prestando mucha atención al ambiente que lo rodeaba. Pero de repente el suelo de la selva se abrió bajo sus pies. Cuando logró recuperarse de la impresión, miró hacia el enorme abismo que había aparecido entre la densa vegetación y vio la profunda caída frente a él. Por pura casualidad -y suerte- descubrió una entrada que permaneció oculta durante millones de años a la cueva más enorme del mundo (cinco veces más grande que la registrada hasta ese momento)”.En un mundo donde quedan tan pocos senderos sin descubrir, es difícil imaginar un laberinto que no hubiese sido penetrado por el hombre hasta los años 90?. Pero cuevas de ese tamaño, en cualquier parte del mundo, usualmente tienen algún tipo de ermita dentro. Pero Son Doong no tiene ninguna. Tampoco tiene estatuas o pinturas prehistóricas grabadas en las paredes. No fue hasta unas dos décadas después de que el granjero descubriera la cueva, que el resto del mundo supo de ella cuando un grupo de científicos la exploró por primera vez el 2009. Son Doong fue nombrada con las palabras vietnamitas para “río de montaña”, ya que en su interior cuenta con su propio gran río torrentoso. También tiene su propia selva y algunas de las estalagmitas más altas del mundo (70 metros de altura).A lo largo de la cueva es posible toparse con dos dolinas, depresiones geológicas en terrenos con relieve kárstico –aquellos que han sido originados por la desintegración y descomposición de ciertas rocas cuyos componentes son solubles en agua. Una columna gigantesca envuelta en coladas estalagmíticas de carbonato cálcico se yergue como un coloso en las profundidades de Hang Ken, una de las 20 cuevas que fueron descubiertas el año pasado en Vietnam.Solo para aventureros que disfruten de acampar. Recorrer la cueva lleva por lo menos doce días durante los cuales las carpas serán el hogar para el descanso del excursionista.El ecosistema interior de Son Doong es tan único como su tamaño e incluso tiene su propio sistema climático en el interior.¿Una selva dentro de una cueva? El derrumbe del techo de Hang Son Doong dejó que entrara la luz, lo que hizo que creciera una densa vegetación.
Discussion about this post