La infidelidad rompe con una de las condiciones básicas en la pareja que es la confianza. Causa un dolor inmenso en el miembro de la pareja engañado, inclusive humillación y es un golpe a su autoestima. Por lo general éste busca causar el mismo dolor en el otro, agrediendo de todas las formas posibles inclusive siéndole infiel también, agravando la crisis y dejando prácticamente sin posibilidades de volver atrás.Para poder superar esta situación hay que entender que la infidelidad es un síntoma de que algo está funcionando mal en la pareja. Por supuesto hay casos de “infieles seriales”, fuera de estos casos donde el infiel engaña por cuestiones personales sin importar que pareja tenga a lado, la infidelidad puede venir a mostrarnos otras cosas: parejas que ya no se sienten compatibles emocional o sexualmente, miembros de la pareja que se sienten solos o desatendidos por el otro, necesidad de aumentar la autoestima, crisis personales, entre otras cuestiones.La pareja debe reflexionar en su caso cual es el motivo que pudo haber ocasionado el engaño y trabajar sobre eso.Es necesario que el que causó la infidelidad tome conciencia y acepte la situación que su accionar provocó, debe trabajar en reconquistar a su pareja, tratando de lograr que se vuelva a confiar. Con paciencia ya que el engaño causa una herida que hay que dejar sanar.La persona engañada no debe pretender olvidar lo ocurrido ya que eso es prácticamente imposible, el hecho ocurrió y no es bueno hacer de cuenta que nada pasó. Si debe intentar perdonar, desde el corazón y sinceramente. Independientemente de si se vuelve o no a retomar la pareja. Perdonar es necesario a un nivel personal para poder luego continuar una vida amorosa sana, sin viejas heridas. Perdonar para que, ya que no podemos olvidarlo, podamos recordarlo sin sufrimiento, sin rencores.Cada pareja es un mundo, y ambos verán qué es lo mejor para cada uno y para los demás miembros de la familia si es que los hay. No hay una única solución ni un único camino a tomar.Siempre después de una fuerte tormenta hay árboles que no las soportan, se caen y mueren. Otros, en cambio, fortalecen sus raíces y continúan de pie fortalecidos. En las parejas pasa lo mismo, después del engaño algunas deciden que lo mejor es tomar distintos caminos, y otras se vuelven fuertes a partir del dolor.ColaboraRita FilichLic. En psicologí[email protected]
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