Una joven posadeña fue detenida en Encarnación (Paraguay) con un bebé de solo seis días de vida que, se presume e investiga, intentaba ingresarlo a la Argentina con el presunto fin de supresión de identidad y venta.El pequeño, de acuerdo a un acta secuestrada a la misionera de 21 años, nació el domingo 30 de abril en el hospital de Caacupé (a 50 kilómetros de Asunción). El viernes la joven tomó un colectivo hacia Encarnación, pero en el trayecto uno de los pasajeros notó que su comportamiento no correspondía al de la madre de un recién nacido. Realizó la denuncia y se activó el alerta de la Policía Nacional de Paraguay y, con la supervisión de un fiscal, se montó el procedimiento para demorarla en Encarnación ante la sospecha del flagrante delito.A los pocos minutos del toque de andén en la terminal, la posadeña fue rodeada por personal de la Policía antes que se subiera a un taxi. Ante las autoridades habría hasta intentado fingir amamantar al bebé y exhibió un documento que no correspondía con el menor que llevaba en brazos.Tras las primeras consultas, su relato no demoró en caer en contradicciones y admitió que no era la madre del varón y que se lo entregó “una amiga que se quedó sin trabajo” y no podía cuidarlo.Según las fuentes consultadas por PRIMERA EDICIÓN, la primera coartada se modificó y la misionera aseguró que “una prima” le solicitó que atienda el bebé hasta que ella pudiera hacerse cargo. Como tampoco tuvo solidez, deslizó que su intención era adoptarlo porque había perdido uno hace poco tiempo y no tenía intenciones de volver a parir.Entre las pertenencias de la posadeña fueron hallados dos documentos argentinos más, correspondientes a un hombre y una mujer mayores de edad y tres tarjetas de débito de un banco argentino a nombre de otras personas. Se intenta establecer si los documentos corresponden a la pareja a la que habría de entregarse la criatura junto a la partida de nacimiento labrada en Caacupé.La mujer declaró que su intención era quedarse en Encarnación hasta la llegada de su “amiga o prima” porque no tenía forma de cruzar a Posadas con el menor. Pero que el conductor del taxi que estaba por abordar le ofreció trasladarla a suelo argentino, porque era factible hacerlo sin inconvenientes.La Fiscalía de turno dispuso que el bebé quede bajo resguardo de la Conserjería de la Niñez y Adolescencia de Paraguay (Conedi) mientras es buscada su madre. También ordenó que la misionera siga demorada e imputada de los delitos de “tráfico de menores en grado de tentativa y falsificación de documentos”.
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