El invierno es la época más propicia para la realización de peeling, la práctica cosmetológica más requerida por nuestras pacientes. Cada una con una necesidad diferente de acuerdo a su edad cutánea y todas con la posibilidad de renovar la piel. El peeling es un tratamiento dermatológico indicado para mejorar la apariencia de la piel, que consiste en la aplicación de un producto químico para exfoliar y desprender las células viejas y dañadas, que luego son reemplazadas, por una nueva piel regenerada, lisa y suave, con menos marcas y arrugas.El peeling puede ser superficial, medio o profundo dependiendo del tipo de piel y del problema a corregir.Es ideal para quitar las manchas en la piel, causadas por el sol o por alguna otra afección particular; también es bueno para paliar el acné o los problemas hormonales. Además es eficaz para combatir las primeras arrugas, mejorar el tono y la textura de la piel, aportándole luminosidad. Tiene otros beneficios para la piel, ya que estimula la creación de colágeno, activa la circulación de la piel y mejora la absorción de otros productos de belleza. También resulta muy bueno para reducir los poros.Esta es la época que nos permite realizar estos tratamientos, ya que la exposición solar es enemiga del peeling y por eso todas las condiciones climáticas están dadas ahora. Claro que hay que tener en cuenta que cuando hace mucho frío también afecta a la piel, a veces tanto como el sol, según la temperatura a la que nos exponemos. ColaboraAlba BrandtCosmiatraEn [email protected]
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