El coordinador de la entidad, Raúl Díaz, señaló que concluyeron la semana de festividad religiosa con un balance “más que positivo”. “La venta fue buena y anduvo bien la comercialización, en especial el jueves santo y el sábado, debido a que las ferias francas no trabajaron. Tratamos de brindar la misma atención al público en variedad, calidad y precio”, indicó. Díaz remarcó que a pesar de las dificultades provocadas por las inclemencias climáticas en las cuencas lecheras de la provincia, lograron abastecer la demanda de quesos, que también fue uno de los productos más requeridos. En cuanto a carnes, lo que más llevó la gente fue el cerdo, el pacú de estanques misioneros y pescado de río. Además, se vendieron en buenos volúmenes el pollo y la carne de vaca, que alcanzaron un nivel superior de venta a días normales.El coordinador espera que la oferta de productos de calidad y buen precio empuje a clientes los clientes a concurrir al Mercado, y que además ayude a productores, vendedores y artesanos a seguir convirtiendo al Mercado en el principal paseo de compras de producción local.
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