Han pasado 35 años de la Guerra del Atlántico Sur donde soldados argentinos demostraron al mundo su valor en combate y de alguna forma sus protagonistas se atrevieron a contar. Algunas de estas experiencias se encuentran en “Voces del viento – Historias soñadas de hombres reales”, una obra que aborda con adecuada sensibilidad las experiencias y relatos de vida de un grupo de veteranos de Malvinas; desde soldados rasos, hasta el General, pasando por pilotos, marinos y civiles.En diálogo con PRIMERA EDICIÓN, su autor, el ingeniero químico Norberto Laffusa, comentó que hace 12 años tiene un programa de radio “Misión Malvinas-banda de hermanos” que se transmite los martes de 20 a 22, a través de Internet, donde los veteranos cuentan cada noche sus experiencias. “Brindamos un espacio al veterano para que cuente lo que tenga ganas de contar, su experiencia malvinera, algunos somos reticentes y otros más abiertos, es un tema que después de digerirlo a nivel familiar, a lo largo de estos 35 años, muchos excombatientes han caído en algunos excesos que les costó su familia, otros se suicidaron y otros se apartaron de la historia. Algunas familias me contaron que se enteraban por primera vez de lo que había pasado a su esposo, padre u otro familiar en Malvinas a raíz de lo que contó en la radio, esas conversaciones nunca las habían tenido en sus casas, lo cual nos llena de satisfacción, por haber brindado el marco para que esa persona se sienta cómoda”, explicó. Al consultarle sobre el nombre del libro, su autor contó: “Voces del viento viene porque muchos soldados contaron que por las noches escuchaban las conversaciones de otros camaradas que hablaban bajito a 300 metros, eso era porque el viento venía de esa dirección y te permitía escuchar, parecían que te hablaban en el oído y eso ha calado muy hondo en los veteranos. Los que han estado en Malvinas saben que el viento y el agua son dos elementos indivisibles”.El libro guarda distintas historias contadas en primera persona sobre lo que hasta hace unos años atrás fue un secreto y ahora uno puede descubrir la otra parte de la historia “hay tantas historias como hombres hubo en Malvinas, así que hay 10 mil historias para contar y muchos son hombres del interior, que no tienen prensa y que nadie sabe que son veteranos porque ellos ocultan su condición por vergüenza, porque ellos perdieron una guerra, no la ganaron. Muchos me dijeron que soñaban desfilar en su pueblo, el desfile de la victoria y como no ganaron algunos hasta del pueblo se han ido avergonzados. Esto te genera una ternura extraordinaria, porque esos muchachos no saben de políticas ni de segundas intenciones, son tan transparentes y honestos que conmueven”, describió el profesional. Devolución de banderaEntre las historias que describió Laffusa se destaca la de la Infantería 12 con Asiento en Corrientes que combatió en la sangrienta batalla de Darwin contra el grupo de paracaidistas ingleses, quienes pensaron en una victoria sencilla y duró más de 36 horas con la muerte del jefe inglés, quien había prometido a sus soldados tomar el té a las 5 de la tarde una vez lograda la victoria (antes de la rendición un grupo de soldados argentinos quemó la bandera para no entregarla al enemigo). “El año pasado, después de 34 años el segundo jefe de aquel regimiento, viajó a Inglaterra y se encontró con el soldado inglés que le había tomado la capitulación (condiciones de rendición), el veterano inglés era profesor en Oxford, lo recibió junto a cien profesores quienes le ofrecieron un almuerzo donde el argentino fue el invitado especial, luego el inglés dio un pequeño discurso contándole a los presentes lo duro que fue pelear con los argentinos en Darwin y que les presentaba al jefe de los argentinos en aquella batalla. El hombre era Alberto Frontera quien le agradeció a través de un intérprete lo conmocionado que estaba. Cuando se iba a sentar el veterano inglés lo llamó por el nombre y se acercó otra persona que traía aquella bandera que habían quemado. Los ingleses la habían recogido a medio quemar y la guardaron durante todos estos años y no la atregaron a los museos porque consideraban que la forma de pelear de los argentinos merecía otro nivel de respeto. El inglés siempre le dijo a sus amigos que alguna vez se iba a dar la oportunidad de devolver eso a sus dueños verdaderos y el asta de la bandera, (lo cual le está diciendo a los argentinos el muchísimo respeto que el soldado argentino se ganó con el inglés y el respeto de hoy que los veteranos ingleses guardan por los veteranos argentinos y el afecto que les provoca la actitud durante todos estos años). Alberto que era un hombre retraído, porque había perdido una guerra, se sentía avergonzado de haber sido quien condujo al fracaso al Regimiento de Infantería 12 y el año pasado el 9 de julio desfiló con el asta y eso generó el resurgir de los soldados del 12 que vieron a su jefe con el asta de la bandera y salieron a decir: ahora sin vergüenza y con orgullo que ellos habían peleado junto a ese hombre”, recordó con orgullo el profesional. El precio de la historiaEstas y otras historias deben conocerse señaló el autor y es por eso que tuvo un trato para que su libro se venda a 200 pesos y con ese dinero lograr la segunda edición con otras historias que también merecen ser contadas. “Hoy un libro a ese precio no existe y no permito que la editorial lo venda más caro y que con la plata que se junte hacer la próxima edición”.Los interesados pueden adquirir el ejemplar pueden pedirlo al teléfono 3764-367197.
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