Una novedad determinante fue la que sumó este jueves la investigación por el crimen del peluquero Benito Rolando Maciel (62), hallado asesinado en un malezal de Eldorado tras permanecer desaparecido una semana. Ante la Justicia Correccional y de Menores, el adolescente de 17 años buscado por el hecho presentó un escrito en el que confesó haber atacado a la víctima, aunque aseguró que lo hizo “en defensa propia”, en medio de una acalorada discusión.El documento al que pudo acceder PRIMERA?EDICIÓN fue presentado por los abogados del menor de edad, encabezados por el letrado Juan Clazon Pizzurno, quien además solicitó la exención de prisión en caso de presentarse ante las autoridades. No obstante aquello, hasta anoche el paradero del adolescente era un misterio.En el escrito, el menor de edad brindó precisiones sobre lo que ocurrió y aseguró que fue la víctima fatal quien lo atacó primero con un cuchillo. En defensa de su vida, dice el adolescente, logró quitarle el cuchillo y asestarle varias puñaladas y golpes, sin imaginar que eso le costaría la vida.Adujo, además, que se encontraba en estado de “emoción violenta”, y en otro tramo del documento dijo haberle pagado 100 pesos a un indigente para que limpiara su casa y se ocupara del cadáver.Era conocidoFue minutos antes del mediodía de ayer que el Juzgado Correccional y de Menores 1 de Eldorado, a cargo de la magistrada Mirtha Elvia Saucedo de Bertolo Andino, recibió el documento que tiene el relato del adolescente.En ese escrito, los abogados solicitaron la exención de prisión del prófugo y el cambio de imputación de la causa en virtud de la “legítima defensa” que asegura haberse presentado en el caso en cuestión. Posteriormente, sigue el descargo del adolescente.El acusado aseguró allí que Maciel lo conocía desde 2015. “Utilizaba a mí y a otros jóvenes como guía turístico, por ejemplo, hay que estar a tal hora en Foz de Iguazú, yo lo guiaba hasta las cercanías, donde realizaba su actividad comercial”. Siempre al decir de su testimonio, en uno de esos viajes el adolescente aseguró notar cuestiones extrañas, razón por la que -según él- decidió apartarse de la compañía del hombre.Pese a aquello, el adolescente buscado dijo que Maciel “se acercó a mi domicilio llamándome desde su teléfono y diciéndome si me podía visitar; aunque no me gustaba la idea, ya lo tenía parado en la puerta y lo hice pasar”.Pelea y ataquesEn el documento el adolescente cuenta que en el interior del departamento se inició una discusión con el peluquero, razón por la que amenazó con denunciarlo ante la Policía. “Tal provocación para mí suficiente produjo que el mismo atentara contra mi persona, con el cuchillo me tiró un puntazo en la zona inguinal izquierda, el cual pude esquivar, pero ya encontrándome en un estado de tremenda necesidad de defenderme, me arroja al suelo, se abalanza arriba mío y prácticamente calculo que durante un minuto y medio o más, estuvimos forcejeando para que no me clave el cuchillo”, dice el relato del adolescente, que entonces asegura que “en esas circunstancias saqué fuerzas de donde no tenía, sumado a que estaba tremendamente alterado, en un estado de crisis violenta, por el cual puedo doblegar el cuchillo y lastimarlo en la zona de cabeza y cuello, era tal mi fuerza debido al shock que estaba viviendo, que le apliqué golpes de puño, tres o cuatro, no recuerdo, y quedó como desmayado”.En esa confesión, el menor asegura que “salgo corriendo de mi domicilio, sin saber en qué dirección?(…)?Yo no vuelvo más a mi casa desde el momento del hecho, es decir que dentro de la propiedad estaban sus cosas personales y una segunda llave de su automotor, (…) porque me había permitido manejar su vehículo, ignorando el estado de este señor que se encontraba en mi casa”. El indigente y los 100 pesosDespués de brindar su versión sobre los hechos, el adolescente contó cómo fue que el cadáver apareció a nueve kilómetros del centro de Eldorado, en un malezal alejado de la planta urbana. “Ante la necesidad de retirar mi ropa que estaba manchada de sangre (…) decidí enviar a un indigente, dándole $100 para que vaya a mi casa y arreglara la misma. A las pocas horas este indigente me informa que mi atacante se encontraba muerto dentro de mi casa, situación que me extrañó (…) Dejé el coche en la Terminal de Micros (sic), cerca de la comisaría, para que lo encontraran rápidamente y al indigente, por temor al enojo de mis padres, le dije que se encargara del cuerpo y tratara de ordenar en la medida de lo posible de limpiar mi casa (…) a lo cual le manifesté, de la misma manera que actué con el vehículo que no sé dónde iba a llevar el cuerpo, pero que pusiera un recibo de servicio a los fines que la Policía se vaya dando cuenta en dónde ocurrieron los hechos y que indefectiblemente al encontrar el cuerpo se iban a dirigir a mi domicilio, como efectivamente creo que ocurrió”.El escapeFinalmente, en el escrito el menor de edad indicó que “tomé un micro en dirección a mi destino, para consultar sobre lo que me había sucedido y cómo debía actuar jurídicamente, ya que si bien había salvado mi vida, este señor me introdujo en un serio problema”, tras lo cual insistió con que no se trató de un robo: “aquí no hubo ninguna clase de dinero de por medio, ya que bastaba pedírselo”.Tras indicar que “oportunamente ampliaré con más detalles los hechos fácticos”, el adolescente insistió con que se trató de un hecho “en legítima defensa”, cuestión que ahora deberá estudiar la Justicia a cargo de la investigación. El hechoMaciel era misionero pero se había radicado hace años en Hurlingham. El lunes 16 de enero salió de casa de su hermana, en Eldorado, con cerca de 20 mil pesos. Su familia radicó entonces una denuncia por desaparición. El lunes 23 de enero el VW?Gol Trend que manejaba apareció abandonado cerca de la terminal. Ese mismo día, ya cerca de la noche, su cuerpo apareció envuelto en un colchón en un malezal. En virtud del grado de descomposición, la autopsia no pudo establecer las causas de la muerte.
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