En la redacción de PRIMERA EDICIÓN también se realizó el taller “Periodismo Móvil” con el objetivo de acercar el conocimiento sobre el potencial que representa esta tecnología como herramienta de trabajo para el periodismo y en la implementación de nuevos formatos de noticias.
Uno de los disertantes fue Eduardo Aguirre, cordobés de 48 años y periodista especializado en divulgación de tecnología con quince años de experiencia. Colabora como redactor en el suplemento “Tendencias” de La Voz del Interior de su provincia. Conduce un programa de radio que funciona como consultorio tecno para los oyentes, llamado “Vamos al Móvil” que se emite por radio Pulxo 95.1 de Córdoba, y también es panelista en Canal 12 cordobés, en temas tecnológicos. Tras su participación en el taller, sintetizó para este Diario parte de las propuestas volcadas durante su exposición.
¿Hace cuánto se dio cuenta de que las nuevas tecnologías iban a cambiar al periodismo?
Hace aproximadamente unos quince años, cuando comencé a hacer periodismo de tecnología, empecé a palpar que la revolución tecnológica era irrefrenable. Mientras que hace unos cinco años empecé a ver cómo los cambios no paraban, no sólo en la industria, sino también en las redes sociales y en las distintas plataformas digitales. Esto hizo que se diera un cambio radical en la industria de los medios y en la profesión periodística en sí. Estas nuevas herramientas comenzaron a demandar a que los periodistas comiencen a sumar más habilidades, a partir de estos cambios tecnológicos.
¿Esta explosión tecnológica se dio de la misma forma en los tres medios periodísticos tradicionales: prensa escrita, radio y televisión?
La irrupción de la Internet hace poco más de 30 años hizo que se borren los límites entre los tres medios tradicionales. El diario en papel comienza a tener su correlato en la plataforma web, la radio también empieza a tener su página web y la televisión hizo lo mismo; a partir de ahí, todo se niveló. Además, hoy por hoy los medios informáticos más avanzados se consideran una plataforma digital que también tiene un soporte analógico (radio, televisión o diario papel), no al revés.
¿Cómo afecta esta transformación al rol del periodista?
Lo veo como un cambio revolucionario en nuestra profesión. Hoy por hoy, un periodista tiene la posibilidad -si sabe utilizar las herramientas informáticas y sobre todo las móviles- de generar contenido multimedial y desde casi cualquier parte del mundo.
Puede transformarse en un medio en sí mismo. Un periodista con un celular en la mano, con los conocimientos y el entrenamiento idóneo, es un medio de comunicación.
En sus viajes por distintos puntos del país, ¿cómo vio las redacciones, en lo que se refiere a esta transformación?
El denominador común en todas las redacciones es la conciencia de la necesidad de evolucionar. El cambio está y hay que hacerlo. Después tenés inconvenientes, obstáculos, resistencia a los cambios. De igual manera, todos saben que esto va a requerir la adaptación y la evolución a estas nuevas formas de comunicar. Necesitamos cambiar, porque el consumo que está haciendo nuestro público cambió. La gente cambió de forma radical la forma de consumir los medios y nosotros nos tenemos que adaptar a eso; el medio que no se adapta está proclive a desaparecer. En este último caso, se aplica a la perfección la máxima darwiniana: ‘No subsiste el más fuerte, sino el que mejor se adapta’.
¿Cómo vislumbra los cambios tecnológicos en los medios hacia adelante?
Si sos un medio gráfico, necesitas producir video; si sos un medio radial, vas a tener que producir video; si sos un medio televisivo, producí video; si tenés una web, produzcan videos… El 75 por ciento del tráfico en dispositivos móviles es en video. ¿Pero cómo llegamos a esto? Primero que nada, tenemos que recordar nuestra relación con internet. Hace unos diez años decíamos ‘voy a entrar a internet para ver esto o lo otro’. Hoy no necesitamos entrar a internet, hoy convivimos con la internet. El cambio fundamental se da a partir de dos ítems principales: uno fue la llegada y explosión tecnológica de los teléfonos móviles y el otro fue el desembarco de la tecnología 4G (cuarta generación), dos factores fundamentales que modificaron nuestra relación con la internet. A partir de que los usuarios poseen teléfonos con pantallas de cinco pulgadas o más grandes y una velocidad casi inmediata en la conexión, sin la necesidad de estar en la oficina o en la casa, eso fue revolucionario. Fue como una segunda revolución, dentro de la misma revolución tecnológica.
Hoy y de cara al futuro, ¿cómo debe nutrirse y prepararse el periodista a estos cambios tecnológicos?
Tenemos que pensar en que ya los periodistas no hacemos radio, gráfica o televisión, hacemos todo eso a la vez. Los periodistas vamos a contar historias mixturando todos los medios que conocemos. Hoy en las diferentes plataformas multimediales un periodista puede transmitir en vivo, subir video, audio, fotos y texto, todo en uno.