“No nos dio tiempo a nada”, asustado y agitado, contó un empleado a su jefe de la empresa yerbatera Piporé de esta localidad, quienes en la tarde del pasado viernes vieron cómo un incendio de gran magnitud consumió una parte del secadero.
El fuego se habría iniciado en dos cintas de secados y se propagó de manera muy rápida y tomó parte la estructura de uno de los galpones, comentaron directivos de la empresa. Destacaron el inmediato accionar de los efectivos de la comisaría local y de bomberos, así como las colaboraciones de dotaciones de Jardín América, Gobernador Roca y San Ignacio, que acudieron de manera urgente.
En una comunicación con PRIMERA EDICIÓN, el presidente de la firma, Gerardo Vallejos contó que “se perdieron alrededor de 40 mil kilos de hoja verde, que era lo que estaba procesando. Esta mañana (por ayer) comenzaron a hacer los peritajes para saber cómo comenzó el fuego”.
Vallejos también es Director en el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), comentó “había otros 130 mil kilos de hoja verde en planchada que se distribuyeron en secaderos de la zona, con el trabajo de nuestro personal que transportó la producción en horas de la madrugada para que no se descomponga la misma”.
Sólo daños materiales
El siniestro ocurrió alrededor de las 18.30. Las imágenes que se viralizaron son elocuentes. Sin embargo, las causas todavía no se pueden determinar. “Los daños materiales se están evaluando, pero lo más importante es que ninguno de los operadores ni los efectivos sufrieron complicaciones”, manifestó.
Confirmó que “toda la planta está asegurada, pero todavía no podemos estimar cuánto perdimos en materia financiera. No fue tan grave pero tampoco hay que minimizar el incendio”, agregó. Vallejos además detalló el funcionamiento de la fábrica que “por día seca unos 200 mil kilos de hoja verde, y por mes está cercano en dos millones de kilos, entre mercado interno y externo según el producto terminado. El stock está garantizado, quiero llevar tranquilidad en este tema porque ya me consultaron”, expresó el directivo.
Con respecto al tiempo que podría demandar la restauración total del secadero, Vallejos indicó que “creemos que lo vamos a reparar pronto, porque el objetivo es que la fábrica vuelva a funcionar a pleno en unos pocos meses”.
Cabe recordar que la cooperativa está en la última etapa de recibir materia prima y procesarla. Lo único que “vamos a tener que rediseñar son las entregas”, afirmó.
Por último, Vallejos destacó todo el trabajo de los operadores de la fábrica, ya que “estaba todo el turno completo trabajando. El secadero, por el horario y día, estaba a pleno. Encima una vez que se controló el fuego empezamos a repartir la materia prima a secaderos de la zona, quienes se pusieron a nuestra disposición”.