POSADAS. La Escuela 609 “Manuel Dorrego” es la única de la capital provincial que cuenta con jornada completa, los chicos llegan todos los días a las 8 y permanecen hasta las 16. El establecimiento está ubicado en el centro del barrio San Jorge y alberga a muchísimos niños de las zonas aledañas. El plantel docente inculca todos los días los valores más importante de la vida, “es difícil porque nosotros debemos mostrar con el ejemplo y no solamente con el discurso”, dijo una docente de la escuela. “Incluso hay padres que traen a sus hijos y que viven un poco más alejados, como Itaembé Miní, por ejemplo”, dijo la directora, Silvia Otano, en una entrevista con PRIMERA EDICIÓN en la que comentó que la semana pasada se realizó un evento cultural. “Allí los chicos demostraron los trabajos que realizan durante todo el año. Fue una verdadera fiesta porque hubo de todo y los padres acompañaron durante toda la jornada”, aseguró la docente. “Los talleres son creativos, recreativos y de apoyo en la áreas esenciales de Lengua y Matemática. Además contamos con una modalidad para séptimo grado que tiene talleres optativos que son: Cocina, Carpintería y Costura”, comentó la directora, quien también confirmó que los talleres son dictados por los propios maestros, “pero también contamos con profesores específicos”. El cuidado del medio ambienteLa docente Otano comentó que hace poco firmaron un convenio con la Municipalidad de la ciudad. “Este año comenzamos un proyecto articulado sobre huertas orgánicas escolares, lo principal es concientizar a los niños sobre el cuidado del medio ambiente”. Con respecto a cómo trabajan los docentes, Otano detalló que “si comparamos con una escuela doble turno, es una organización diferentes en cuanto a los talleres, porque los maestros están ocho horas en la escuela, unas diez horas cátedras, esa es la gran diferencia. Nosotros compartimos con nuestros alumnos las mejores horas del día, siempre decimos que estamos más tiempo en la escuela que con nuestra propia familia”. En cuanto a los problemas, Otano reveló que, para los chicos, a veces es complicado estudiar porque cuando llueve “hay grados que deben dar clases en el SUM, porque se inundan. Este salón es utilizado como comedor, donde los estudiantes reciben el almuerzo y la merienda”, dijo Otano. La matrícula de alumnos supera los trescientos y cerca de veinte docentes integran el plantel. La maestra contó que hay una sola cocinera y que cobra una colaboración que les dan desde la Comisión de Padres, que ayuda en la escuela. Cabe recordar, que este medio publicó la semana pasada la información de que la Escuela 609 compartiría sus instalaciones con una secundaria, el Polivalente 61.Y esto generó un reclamo de los padres, quienes rechazaron la posibilidad y realizaron una “toma” de la escuela, que según contaron podría continuar hoy.
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