BUENOS AIRES (NA). El partido entre Independiente y Belgrano de Córdoba fue suspendido cuando estaba por empezar el segundo tiempo, en Avellaneda, ya que los hinchas del equipo local arrojaron bombas de estruendo.Los proyectiles cayeron cerca del arquero Juan Carlos Olave, de Belgrano, quien quedó aturdido y caído en el terreno de juego mientras ocupaba el arco que da espaldas a la cabecera local.Ante la imposibilidad de que Olave pueda seguir jugando, el árbitro Saúl Laverni suspendió el cotejo.El incidente se produjo mientras los futbolistas se disponían a comenzar el complemento, y cuando el equipo cordobés ganaba por 1 a 0. En ese momento, Olave cayó al piso y fue socorrido rápidamente por sus compañeros, pero los hinchas siguieron arrojando proyectiles, por lo cual el arquero se levantó y se alejó del área.Al mismo tiempo, Américo Gallego -entrenador del equipo rojo- se metió en el campo para pedirles calma a los hinchas.“No lo puedo creer, estoy muy mal…”, dijo el director técnico, al borde de las lágrimas y en medio de su desesperación, porque el equipo sigue en zona de descenso.Ahora, intervendrá el tribunal de disciplina de la AFA, y luego del descargo de las autoridades de Independiente, tomará una decisión.Las opciones no son muchas: o se le da por perdido el partido a Independiente, o bien continuará en fecha a determinar y -seguramente- en otro escenario.Mientras hubo fútbol, el equipo local tuvo más intenciones ofensivas, pero careció de profundidad y en un contragolpe Belgrano se puso en ventaja.Los intentos del local quedaron reducidos a una jugada que desperdició Farías, en la puerta del área chica, y en un violento remate de Vallés, que se fue desviado.Casi sobre el final de la etapa, a los 41 minutos, Jorge Velázquez recibió la pelota por el sector izquierdo, encaró y definió con categoría ante la salida de Hilario Navarro para poner el 1-0 favorable a la visita, marcador con el que se suspendió el encuentro.
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