POSADAS. El sargento primero de la Policía detenido bajo sospecha de abusar sexualmente de sus hijas de trece y quince años, fue denunciado ahora por una joven de 22, quien afirmó que fue manoseada por el efectivo cuando era menor de edad, indicó un vocero oficial. A todo esto, sus dos hijas declararon ayer en Cámara Gesell y complicaron aún más su situación procesal, teniendo en cuenta que ratificaron sus dichos en sede policial, por lo que la Justicia determinó que el suboficial permanezca tras las rejas, agregó la misma fuente. Tal como se publicó ayer, el acusado fue indagado el pasado miércoles por el juez de Instrucción 7 de esta capital, José Alberto López, donde negó la existencia del hecho y se limitó a explicar que todo se trató de un “malentendido”: que recriminó a su hija el hecho de no haber limpiado la casa tomándola de los brazos y que su otro hijo, de 16, creyó que estaba abusando sexualmente de ella. Testigo claveJustamente este adolescente, hijo del sospechoso, es considerado testigo clave de una posible circunstancia de abuso sexual, por lo que el mencionado magistrado estaría aguardando tomarle declaración (a través de Cámara Gesell o en sede judicial), para poder cerrar la ronda de testimonios y abocarse a analizar otros indicios y exámenes médicos para poder resolver la situación del efectivo. El caso trascendió el sábado pasado, cuando una mujer de cuarenta años, domiciliada en Candelaria, se presentó en la Comisaría de la Mujer, dependiente de la UR X, y denunció al vecino de violar a sus dos hijas. La denunciante contó que el hijo del policía, de 16 años, llegó a su casa y contó que había encontrado al padre abusando de su hermana de quince.Fueron sus propios compañeros, ya que el acusado presta servicios en la Dirección de Investigaciones, quienes lo arrestaron en su domicilio de Candelaria. La Justicia ordenó la detención cuando llegó a manos del magistrado interviniente el resultado del informe médico, que determinó defloración de larga data en las chicas de trece y quince años.Decidió romper el silencioDurante la jornada de ayer fue radicada otra denuncia en contra del sargento detenido y por parte de una joven de 22 años, revelaron fuentes oficiales. Según la denunciante, en 2005 y cuando tenía quince años, convivía con el acusado en el mismo domicilio, ya que su madre era su concubina. En fecha en que no pudo precisar, durante el citado año, y en circunstancias en que se hallaba dentro de un dormitorio de la mencionada casa, en el barrio Anselmo de Candelaria, fue víctima de manoseos y tocamientos por parte del sujeto, confió la misma fuente. A fines de 2006, con 16 años, se fue de la casa para establecerse en Posadas. Tiempo después su madre se separó del sospechoso. Esta presentación penal ya está en manos del mismo juez que investiga la otra causa, donde están involucradas las hijas del acusado y que fue calificada como “presunto abuso sexual agravado por el vínculo en concurso ideal”.




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