POSADAS. Con el propósito de “mejorar constantemente” y “brindarse plenamente a la familia del deudo”, la empresa de sepelios Casa Cuneo SA incorporó nuevos servicios que se suman a los tradicionalmente conocidos. La remodelación de las tres salas velatorias que posee sobre la calle San Martín y la incorporación de una técnica que se denomina tanatopraxia, que permite restaurar y conservar un cuerpo evitando la descomposición, es una de las principales novedades de esta empresa con personal con más de treinta años de experiencia y atención personalizada de los titulares. En este proceso también se destaca la adquisición de una flota de vehículos Citroën C4 cero kilómetro, que se agrega a los Peugeot. Cada flota está compuesta por coche portacoronas, un coche fúnebre tipo americano para el traslado del féretro y dos remises para los familiares del fallecido.Asimismo, la firma incorporó una ceremonia para el momento del cierre del ataúd, respetando el rito funerario de acuerdo a la religión que profesa cada familia (judíos, evangélicos, católicos) y la asistencia al deudo, que implica la designación de un empleado a entera disposición de la familia durante la permanencia en la sala.También corren por cuenta de los profesionales de Casa Cuneo los asesoramientos para trámites posteriores al velatorio, como pensiones, jubilaciones, subsidios, reintegros; gestiones ante el Registro de las Personas; participación a nombre de la familia en un diario local, además de una tarjeta de ubicación que se entrega a los deudos especificando el lugar donde esta inhumada la persona. Al explicar su trabajo, el presidente de Casa Cuneo SA y tanatólogo de la empresa, Juan Goya, señaló que la tanatopraxia es utilizada para evitar la descomposición de un cuerpo y “nosotros la aconsejamos, sobre todo cuando hay deudos que deben venir de lejos”. “Es que en esta funeraria no existe lo que se denomina ataúd cerrado. Brindamos esta técnica, que tiene una duración de tres horas, buscando evitar todo el sufrimiento que tuvo el fallecido, cambiando su fisonomía. Es decir, no hay dolor, hinchazón ni derrame de líquido visible. También realizamos la tanatoestética, que es el acondicionamiento de un cuerpo a través de técnicas de maquillaje”, relató Goya, que se dispone a viajar a la Universidad de Cuyo, en Mendoza, a fin de realizar un curso para restaurar el cuerpo en el caso de accidentes de tránsito y así “poder velar a la persona como corresponde”.“Las cosas recientemente incorporadas hacen al cambio del servicio, que busca la excelencia, y que anteriormente estaba planteado como un traslado desde la casa velatoria hasta el cementerio. Estamos a la altura de los servicios de índole nacional e internacional porque hicimos cursos dentro y fuera del país”, aseguró.La unidad de traslado también hace a la diferencia, ya que permanece disponible con un chofer en caso de la búsqueda de familiares que arriban al aeropuerto o a la terminal de ómnibus. ResponsabilidadA través del plan para jubilados nacionales, Casa Cuneo brinda una cobertura íntegra y con una calidad de servicios, superior a la que la mayoría posee. Existen convenios con instituciones, sindicatos, empresas, con beneficios como descuentos en farmacias, ópticas y casas adheridas.Miles de personas están incorporadas a “nuestro sistema para la cobertura de los servicios fúnebres y servicios sociales. Trabajamos con un volumen de gente enorme. Son alrededor de 500 altas mensuales y no hay bajas voluntarias. Es de destacar lo que está pasando porque habla del tipo de trabajo que hacemos, de la responsabilidad, calidad”, manifestó el asesor Alberto Racca. “Muchas veces no sabemos cómo manejarnos pero con un llamado telefónico del afiliado o la familia, todo se soluciona. Nos brindan el número de socio, miramos en el sistema el estado de cobertura y nos encargamos de todo: buscar los restos, acondicionarlos, comienza el velatorio en el domicilio o en las salas, por una cuota que tiene un costo de 31 pesos”, confió. “Estamos trabajando para mejorar constantemente el servicio. La idea es ser profesionales en lo que hacemos. Es una sumatoria de detalles. No vendemos ataúdes sino que buscamos brindar una solución. El propósito es brindarse a la familia y protegerla en un momento tan difícil.





Discussion about this post