Un paraíso narco

Las organizaciones narcocriminales ganan peso en la región y una nueva muestra de esa realidad es el descubrimiento de una isla emplazada a apenas treinta kilómetros de Posadas que es utilizada como escala de almacenamiento en el transporte de marihuana desde Paraguay hacia la Argentina.Así lo pudo confirmar PRIMERA EDICIÓN mediante sus fuentes, quienes revelaron que aquel lugar abandonado en medio del río Paraná, donde de una costa a otra hay más de doce kilómetros de distancia, es literalmente “tierra de nadie”. O mejor dicho, “tierra narco”.Autoridades argentinas realizaron un profundo seguimiento durante varios meses a los fines de establecer la realidad que se vive en el lugar. Concluyeron entonces que allí había presuntos movimiento de varias organizaciones narcocriminales, pero sólo eso. Es que a la hora de actuar poco pudieron hacer debido a que la isla está más allá de la frontera, es decir, en aguas paraguayas. Debido a eso es que se giró la investigación a las autoridades del país vecino, pero en Paraguay la respuesta habría sido que las fuerzas no cuentan con los medios necesarios para continuar con la delicada pesquisa.Un “paraíso” en aguas de nadieDecir que la isla está de un lado u otro de la frontera es simplemente una exactitud geográfica. Es que en medio de ese verdadero mar los límites son difusos, la soberanía prácticamente no existe y, por ello, tampoco los controles de las autoridades de uno u otro país.El islote tiene aproximadamente 500 metros de largo por 50 de ancho y se ubica en el sector donde el Paraná comienza a ensancharse para transformarse en el lago que formó la construcción de la represa hidroeléctrica Yacyretá.La costa más cercana está a cinco kilómetros de distancia y pertenece a tierra correntina.?Sin embargo, el lugar habitado más cercano está a diez kilómetros y es la localidad paraguaya de Carmen del Paraná, distante a 31 kilómetros de Encarnación por la ruta 1. Sin embargo, desde la flamante avenida costanera de esa localidad es prácticamente imposible divisar la isla a simple vista.La situación geográfica es ideal en virtud de que se trata de un pedazo de tierra sumido en medio de un Paraná gigante que no se ve desde la costa y que tampoco llama la atención en medio de tanto río.Varios meses de investigaciónLa investigación argentina se inició hace varios meses, prácticamente a fines del año pasado, cuando un operativo especial se topó con un grupo de barcazas que estaban listas para desembarcar en Argentina. Las mismas iban cargadas con casi una tonelada de marihuana y provenían, según se creía ahí, de la costa paraguaya.Ese trabajo permitió seguir una línea que arrojó resultados positivos unas pocas semanas más tarde, cuando las autoridades dieron con lo que parecía una desolada isla en medio del Paraná. No obstante, a medida que se fueron acercando descubrieron que el lugar escondía secretos profundos que se ocultaban detrás de la arena y la escasa vegetación.Como se observa en la fotografía que acompaña la página 58, los detectives enseguida se toparon con varias construcciones precarias distribuidas a lo largo y ancho del pedazo de tierra. La sigilosa investigación determinó entonces que las mismas habían sido construidas como lugares de almacenamiento y acopio de sustancias prohibidas.Lentamente los investigadores determinaron que el paraíso natural había sido transformado en un “paraíso narco” por  varias organizaciones criminales que se establecieron en la zona. Las pesquisas indicaron que varias redes confluían en ese lugar y, merced al presupuesto de cada una, construían sus depósitos de mayor o menor tamaño.No es una casualidad. Es que la ubicación de la isla es estratégica, no solamente por el grado de ocultamiento que provee en medio del río, sino también por la cercanía en la que se encuentra la costa argentina. La isla es, al decir de los investigadores, una escala para el tráfico de marihuana paraguaya hacia la Argentina.En ese sentido es que las autoridades sospechan que desde ese punto neurálgico ingresó una buena cantidad de la droga que posteriormente fue descubierta y decomisada en las rutas de la zona.Este diario pudo saber por sus fuentes que debido a las cuestiones de jurisdicción antes mencionada es que las autoridades argentinas remitieron la investigación a sus pares de Paraguay, pero la falta de medios habría sido determinante para que poco o nada suceda.Así las cosas, poco se sabe actualmente sobre la “isla narco”. Una de las sospechas indica que las bandas continúan trabajando en la escena ante la ausencia de control de las autoridades. La otra teoría dice que varias de las organizaciones narco decidieron abandonarla a sabiendas de que estaban siendo vistos de cerca por los investigadores. Allí, en medio del Paraná, no hay certezas. Sigue el misterio.