Carlos Moisés Bessone fue tomado cautivo el martes por la noche y liberado durante las primeras horas del jueves, cuando sus captores lo trasladaban a su domicilio con la intención que pagara el dinero que le exigían a través de un depósito bancario digital. A modo de garantía les iba a facilitar su pasaporte y documento de identidad.La banda exigía 30 millones de guaraníes para liberar con vida al empresario, pero investigadores de la Policía Nacional de Paraguay los habrían cercado gracias al rastreo del teléfono celular de Bessone, el mismo aparato lo habían utilizado para mantener contacto con los familiares, dar señales de vida y negociar el monto del rescate.Los delincuentes soltaron a Bessone pero fueron detenidos pocas horas después. Se trata de tres paraguayos, uno de ellos supuesto amigo de la víctima.Según medios de comunicación del vecino país, Bessone reside en Ciudad del Este y habría purgado una condena por distribuir 40 mil dólares y cerca de diez mil pesos falsificados en Asunción, en marzo de 2014.




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