Desde el jueves pasado, primer día de junio, el Sanatorio Boratti dejó de atender a los afiliados del Pami, a excepción de los nueve pacientes que tienen esa obra social y siguen internados en ese centro de salud. Pese a que desde ese nosocomio habían garantizado la atención durante junio y julio inclusive, desde el Pami central le dieron de baja como prestador el 1 de junio, tal como lo estableció en la Resolución 080-17 de ese organismo. Por ello, durante la primera semana de este mes, los 7.600 afiliados de la obra social de los jubilados que tenían Boratti se encontraron sin prestador. Esta situación comenzó a solucionarse a partir del martes a media mañana, cuando la Unidad de Gestión Local (UGL) del Pami fue autorizada desde la oficina central a iniciar la reasignación de estos afiliados a los tres prestadores sanatoriales que absorberán a los 7.600 pacientes: los sanatorios Posadas, Buenos Aires y Nosiglia. Siguen médicos de cabeceraVale recordar que los médicos de cabecera no sufrieron cambio alguno. Es decir, que los pacientes que se atendían en el Boratti seguirán con el mismo médico de cabecera pero el segundo y tercer nivel de prestación será en otro sanatorio. La reasignación es un trámite personal y, una vez que se realiza, en la sede de la UGL, impacta en el sistema a las pocas horas. Este proceso comenzó el martes, pasada la media mañana, según confirmó a PRIMERA EDICIÓN el coordinador médico del Pami Misiones, Adalberto Lavilla. “Ningún afiliado quedará sin prestador sanatorial, está asegurada la atención para todos. Pero pedimos que no vengan a hacer el trámite en estampida porque no tenemos capacidad operativa para atenderlos a todos juntos. La reasignación es un trámite sencillo que impacta en el sistema en pocas horas por lo que los pacientes pueden atenderse en el día con el nuevo prestador. Esta redistribución se está haciendo en base a los médicos de cabecera”, aseguró. Un caso concreto Norma Vega y su esposo Alfredo Altamirano son dos de los 7.600 jubilados que estaban asignados al Boratti. Alfredo es paciente oncológico y, la semana pasada, cuando fue a llevar los resultados (que salieron elevados) a su médica oncóloga se enteró que esa especialista con la que se trata desde hace siete años, ya no lo atenderá más. “Me fui al Pami y me dieron una orden oncológica para que presentara en el Boratti pero, el viernes pasado, en ese sanatorio me dijeron que ellos no podían recibir esa orden porque no se había firmado ningún convenio aún. Entonces, hoy (por ayer) regresé al Pami y me anunciaron que nos pasaban al sanatorio Buenos Aires, pero cuando fui a pedir el turno en ese sanatorio me dijeron que todavía no impactó ese cambio en el sistema. Volví al Pami y me recomendaron que espere unos días; mientras tanto mi esposo sigue sin que lo vea un especialista y no sabemos si tiene que seguir con su tratamiento actual o no”, contó muy angustiada Norma, quien hace todas las gestiones porque su esposo tiene 81 años. Pago al Parque de la Salud Según confirmó el presidente de la UGL, Rolando Rubleski, el martes se concretó el pago parcial de la deuda del Pami con los hospitales de Pediatría y Madariaga. Cada uno de estos nosocomios recibió cheques por dos meses de prestación correspondientes a octubre y noviembre de 2016. En tanto, según detalló Lavilla se está coordinando con las autoridades de ambos hospitales la forma de continuar con la prestación de los afiliados del Pami. “El tema es que los hospitales de autogestión no pueden firmar con este nuevo sistema capitado; antes estaban encuadrados en otro sistema por lo que estamos analizando la cuestión jurídica para poder incluir a los hospitales entre nuestros prestadores. Mientras tanto, puedo garantizar que se está atendiendo con normalidad, pese a que la semana pasada se reguló la prestación y se reprogramaron muchos turnos”, señaló.





Discussion about this post