Los habitantes del barrio Bancario de Aristóbulo del Valle se vieron sacudidos por una fuerte explosión en un taller metalúrgico, que causó la muerte de un joven operario y lesiones graves a otros dos, quienes fueron hospitalizados en penoso estado, según fuentes policiales.El tremendo episodio ocurrió a las 15.30 en un tinglado ubicado en proximidades de las calles Mariano Moreno casi Sáenz Peña, en momentos en que Pablo Javier Maurak (22) se hallaba manipulando un tubo de oxígeno de cinco kilogramos, que momentos antes había sido dejado en el lugar por un cliente para que se lo cargara. Por motivos desconocidos, y que comenzaron a investigarse, el cilindro de metal estalló y los trozos de prácticamente despedazaron al empleado, y al mismo tiempo provocaron heridas a Mario Rafael Matías (30) y a Jorge Posdeley (32), quienes se hallaban realizando otras labores.Pudo ser mayorLa magnitud de la detonación fue tal que además causó la voladura de una pared del tinglado, agregaron los informantes. En el lugar también se hallaban otros tres empleados que milagrosamente no fueron alcanzados por los hierros convertidos en verdaderos proyectiles.Con la premura del caso, los dos operarios sobrevivientes fueron trasladados a un centro asistencial local, donde luego de las primeras curaciones los derivaron al Hospital Samic de Oberá. La Comisaría de Aristóbulo del Valle aguardaba anoche el informe médico con el tipo de lesiones sufridas por ambos. Extraoficialmente se supo que uno de ellos sufrió amputaciones y mutilaciones de miembros.Penosa laborA todo esto, el personal de la División Criminalística de la Unidad Regional VIII San Vicente y un grupo de expertos en explosivos de bomberos concurrieron al lugar y realizaron las inspecciones. Además recolectaron los vestigios (trozos de hierro retorcido) a los efectos de emitir un informe acerca las posibles causas de la explosión.Una de las tareas más penosas encaradas por los policías y por los bomberos fue la búsqueda de los restos esparcidos del infortunado trabajador, los cuales fueron encontrados desperdigados en un radio de hasta cuatro cuadras del lugar del hecho, acotaron las fuentes. Los asombrados vecinos del barrio Bancario observaron atónitos esta búsqueda.Después de las diligencias de rigor, las actuaciones fueron puestas a disposición del Juzgado de Instrucción de turno de Oberá.





Discussion about this post