Hace aproximadamente ocho meses que, Inés Piccotto, afiliada de Pami, espera por una prótesis importada que permita su operación de cadera debido a un diagnóstico de artrosis. Ante el retraso, la obra social le ofreció otras prótesis, incluida una nacional y otra de origen brasilero pero su médico no las recomienda, por lo que la mujer insiste en que Pami le asegure la provisión de la que necesita. El trámite se inició el pasado 4 de febrero cuando su médico hizo el pedido a la obra social de una prótesis total de cadera no cementada con descartables, cuyas características las reúne una que fabrica la marca Johnson & Johnson. “El médico determina que tiene que ser ese tipo de prótesis por la edad y por la actividad que la persona desarrolla. Porque se supone que ese tipo de prótesis duran aproximadamente treinta años. En cambio, las prótesis nacionales que son un poco más baratas, se les ponen a personas con edad más avanzada porque duran menos, entre cinco y diez años”, indicó Piccotto, en diálogo con PRIMERA EDICIÓN. “Entonces, para evitar que la persona se vuelva a operar, el médico pide directamente una prótesis importada”. A los pocos días de realizado el pedido, Piccotto aseguró que se acercó a Pami a preguntar si no habría problemas en la provisión de la prótesis “porque sé que a las obras sociales les cuesta entregar las importadas porque son un poco más caras”. Le aseguraron que el trámite sería más largo, porque se debe realizar en Buenos Aires, pero que la misma llegaría sin problemas y le dieron un número de expediente.Durante los meses siguientes, la mujer visitó regularmente la obra social para conocer la situación de su pedido, que seguía sin novedades. A los cuatro meses “me dijeron que el trámite estaba saliendo y que en 45 días iba a tener mi prótesis”. Sin embargo se cumplieron los seis meses sin noticias, por lo que envió una carta documento a la obra social reclamando la prótesis. La respuesta fue que la misma “se encuentra disponible y será entregada cuando el médico determine la fecha de cirugía”. La cirugía se programó para el 9 de septiembre, pero la prótesis no apareció. “Al día de hoy no tengo ninguna novedad. Ni de donde está la prótesis, la fecha de cirugía pasó y no tengo solución. Mientras sigue el dolor, quiero una respuesta”, cerró.




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