E s nuestro espacio interior al que nada ni nadie puede llegar, sólo nosotros. Es el centro mismo de la existencia está dentro nuestro y tiene un guardián en el umbral… la respiración.Es tan etéreo y sutil, es como un momento fugaz. Sublime, misterioso, inabarcable, incomprensible para otro, pero real para uno mismo.Es nuestro ángel guardián, nuestro maestro interno, nuestra guía.Sólo tiene una condición para llegar a él… observa tu respiración, observa y no interfieras. Sólo observa, es parte de tu crecimiento conocerte. Observa, no dejes que tu mente se distraiga o te cuente historias… No…Vuelve a observar. Inspira suave, lento y profundo y así comprenderás qué te está sucediendo. Deja que tu cuerpo te hable, deja que te cuente sus dolencias, sus impedimentos, sus historias. ¡Quien más te las puede contar! Son tuyas, tuyas. Las has ido acumulado durante mucho tiempo y ahora quizás es el momento de volver a reencontrarte.Nadie te puede decir cómo… sólo tu respiración. Confía, entrégate…. ¿acaso piensas que tú mismo te puedes hacer daño?Acaso ¿tienes miedo de ti mismo?Sólo hay dos movimientos en el Universo… expansión, contracción… así comenzó todo.Uno te pone en movimiento con la vida, el otro lo detiene.Simplemente déjate llevar. Tú eres tu propia historia. Y así cuando estés en intimidad contigo mismo puedes decirte… Sí, veo el presente.Asumo el pasado. Veo todo lo que me toca.Hoy elijo ver y desde aquí puedo elegir. Elijo el presente, elijo la vida, elijo vivir.Lo podemos hacer varias veces al día.Probemos a ver qué sucede.La vida nos trae siempre algo nuevo si estamos decididos a cambiar, pero sólo lo podemos hacer desde el presente. Porque es en el único momento donde están todas las posibilidades.Colabora: Patricia [email protected] Facebook: Patricia Monica Couceiro 3764 829015





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