Los jueces la eligieron en una gala realizada en el Casino Magic de la capital neuquina, sin embargo, al día siguiente la llamó la organización para avisarle que le quitarían la corona y la posibilidad de viajar a Buenos Aires para participar de la siguiente etapa. Es que Fernández es madre de Cloé, una pequeña de dos años y, según le explicaron, eso le quitaba la posibilidad de participar en el concurso. Lo curioso es que la joven nunca negó que tuviera una hija. De hecho, lo había dejado claro en el momento de inscripción.Frente a esto, Fernández decidió publicar su historia en Facebook y, ante el efecto que generó su denuncia en las redes sociales, desde la organización la llamaron este domingo para darle nuevamente su corona.La joven insistió en que nunca ocultó a su hija. Y reveló que desde la organización le explicaron que eso iba en contra del reglamento pero que en Neuquén no estaban al tanto. “Todavía no decidí si aceptar otra vez la corona”, dijo Fernández a un medio nacional, y remarcó estar a la espera por parte de la organización de un documento firmado que certifique que ser madre no es un impedimento.“Yo siempre estuve con mi hija, no la escondí; por eso estoy molesta con los organizadores”, manifestó cuando le quitaron el cetro y dijo que también le da bronca “que en un certamen así discriminen a las mamás”. “Cuando tuve a mi hija, varias me dijeron que era un error, pero mi bebé fue concebida con amor y hay tantas mujeres bellas de mi edad que tienen todos los requisitos; no es justo que no nos dejen cumplir nuestros sueños por ser madres”, cuestionó.
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