El despertar y la gratitud de vivir sanamente comienza ahí y sigue su espectro ampliándose. El cuerpo como contenedor brinda funciones correctas de los sistemas cuando de forma deliberada nos organizamos a mejorar la calidad del día en sí. Viendo desde afuera, lo externo, la figura y los albores de cambios pueden indicar que como por dentro, las cosas andan bien afuera y estarían demostrando lo mismo, como una mente calma que nos devuelve la lucidez en la mirada. Un rostro irrigado de sangre que nota un cutis con color desconoce la tensión facial. Aquellos pequeños sutiles movimientos que se relacionan con la salud prestan la soltura necesaria y en consecuencia, devuelven la movilidad en zonas como por ejemplo, las caderas. Ligados a esta íntegra y mundana visión, lo que expulsamos residualmente corre rápido, indicando un buen uso y función del sistema renal y excretor. Las caminatas diarias a modo de “footing” merecen su lugar para ejemplificar una actividad liviana y un deporte a elección, se pueden combinar para brindar los beneficios internos y externos por igual, denotando que se puede sonreír auténticamente. Colabora: César Aguirre AyraultTerapias corporales. Masajista californiano.En Facebook: Equilibrándonos Masajes3764 791631
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